BeautyHombre: Que el afeitado no te cueste la piel

Philips

¿Sabías que un joven que empiece a rasurarse a los 13 años, cuando tenga 85 se habrá afeitado durante más de seis meses de forma ininterrumpida? Ese gesto, que elimina el pelo del rostro, desprotege también la piel y la hace más sensible y vulnerable. Descubre cómo tienes que afeitarte para minimizar la agresión que sufre tu piel y cómo la debes proteger a continuación…

Quattro Titanium Precisión, de Wilkinson
Phenom Power y Manual, de Gillette

El pelo puede llegar a cubrir un tercio de la piel del rostro masculino. Según sea más o menos poblada, una barba puede llegar a tener de 3.000 a 25.000 pelos que crecen casi 0,4 mm diario. Deshacerse de ellos implica hacer uso de la maquinilla de cuchillaso de una máquina de afeitar eléctrica que además de rasurar el pelo pero también se llevan por delante las células más superficiales de la capa córnea.

Esta exfoliación hace que la película hidrolipídica de la piel se altere, dando paso a la sequedad cutánea. El afeitado constituye, pues, la agresión diaria más seria que sufre la piel masculina y algunas veces mal tolerada por las pieles más sensibles. Afeitarse de la forma adecuada minimiza las agresiones. Utilizar los productos adecuados después del rasurado refrescará la piel y restablecerá el equilibrio perdido.

Serie 3, de Braun
Sensotouch 3D, de Philips

Hace muy pocos años el afeitado se dividía en dos grupos claramente diferenciado: con hoja (maquinillas o navaja) o con maquinilla eléctrica. El primer sistema suponía la aplicación de un producto que ablandan la barba y el agua tenía un papel fundamental. El rasurado con maquinilla eléctrica se hacía en seco y, en un principio, no precisaba de ningún producto cosmético previo que tratara la piel o la barba. En la actualidad todo eso ha cambiado. Las clásicas maquinillas de afeitar incorporan pilas para reducir la fricción e incrementar el deslizamiento de la máquina, y algunas maquinillas eléctricas no sólo se pueen utilizar con espuma o gel de afeitado  para acondicionar la piel, sino que además se pueden utilizar bajo la ducha, como es el caso de los modelos Philips o Braun.

Afeitado con cuchilla

Gel Rasage Peau Normal, de Biotherm Homme
Espuma de afeitar, de Eau Thermale de Avène

El afeitado con cuchilla es el adecuado para barbas duras, pieles normales y hombres que quieren un afeitado muy apurado. Para afeitarse con cuchilla se pueden utilizar tres tipos de productos: el gel, la espuma y la crema. La elección entre uno u otro varía en función del tipo de piel y de barba. El gel se emplea para pieles grasas y con imperfecciones, las recubre y facilita el deslizamiento de la hoja. La espuma es la textura más indicada para pieles más secas, ya que es untuosa y suave. La crema se utiliza para afeitar con brocha, y es la que utilizan los hombres de barba dura.
Según unos estudios sobre los hábitos de cuidado del aspecto personal, los hombres habitualmente rasuren su rostro y luego se duchan, un grave error ya si lo hiciesen al revés es decir afeitarse después de la ducha. De esa forma el calor del agua abre los poros, ablanda las barbas duras y, en consecuencia, el afeitado sería menos molesto.

No nos podemos engañar, por suave que sea, el afeitado no deja de ser una agresión para la piel, pero las molestias serán inferiores si se sigue un sencillo protocolo que resumimos en diez puntos:

Close Shavers, de Kiehl's

… y después del afeitado

Gel afeitado, de Ducray Homme
Huile de Rasage, de Clarins Men

Las famosas «palmas» sobre el rostro tienen su sentido: estimulan la microcirculación sanguínea y contribuyen a potenciar la acción de la cosmética.

Afeitado con maquinilla eléctrica

Por norma general los hombres de Francia, Italia y España tienen la piel morena y resistente, por eso el sistema de afeitado que usan es la maquinilla de hojas. Esta norma, sin embargo, se rompe sobre todo entre los hombres más jóvenes, con la piel grasa y sin problemas ni irritaciones, o entre los que tienen una barba poco densa. Estos, cómo los escandinavos, los holandeses y los alemanes, eligen preferiblemente la maquinilla eléctrica.

Age Defense Hydrator SPF 15, de Clinique Skin Supplies for Men
After Shave Balm Gucci by Gucci Sport

Los hombres de barba más dura que prefieren las maquinillas eléctricas precisan de más pases, ya que apuran menos que las de hoja.
Una de las características principales de las maquinillas eléctricas es la rapidez, ya que para rasurarse no es necesario seguir ningún ritual previo y no siempre se tiene que usar un producto con anterioridad. El resultado es muy bueno y la piel no sufre demasiado, a no ser que se tenga una barba muy dura y hagan falta muchas pasadas y fuerza presión sobre la piel. Resumimos en cinco puntos los consejos para un afeitado en seco más suave.

Después del rasurado: la reparación

Como hemos mencionado con anterioridad, el afeitado supone una gran agresión para la piel, y por este motivo hay que acondicionarla al finalizar el proceso. Los productos para después del afeitado se presentan en diferentes texturas según el tipo de piel y preferencias. Hoy se puede elegir entre cremas, fluidos, geles, bálsamos y lociones con o sin alcohol. Utilizarlos constituye una necesidad y un placer cosmético, ya que son productos no grasos y refrescantes que calman la piel al instante. Entre otros beneficios se puede destacar su poder cicatrizante, revitalizante, hidratante y protector.

Sensi Baume Mineral de Vichy Homme
Gel Après Rasage, de Jean Paul Gaultier

Los after-shave se presentan bajo dos texturas diferentes (líquida o más cremosa) pero con un mismo objetivo: cerrar los poros y calmar las pieles irritadas por el afeitado. Más allá del placer que aporta una u otra se puede tener en cuenta sus indicaciones.
Las lociones con alcohol tienen propiedades tonificantes, refrescantes y desinfectantes pero no todas las pieles las toleran, sobre todo las más sensibles y reactivas. Sí en cambio las pieles normales y especialmente las mixtas, que se aprovechan de sus propiedades astringentes.
Para los amantes de estas soluciones acuosas existen lociones sin alcohol, con las mismas propiedades pero sin la excepcional efecto frescor que proporciona el alcohol.
Los bálsamos hidratan la piel y están indicados para las pieles más sensibles que reaccionan mal ante la presencia de alcohol. Su textura es fluida pero no grasa-por eso se absorben rápidamente y no dejan rastro-y aportan hidratación a la piel gracias a sus principios activos vegetales que además alivian las heridas o irritaciones.

Propuestas para el afeitado

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