A finales de junio recibí la invitación para probar un tratamiento adelgazante. Tengo que reconocer que era tentadora (¡la invitación!) porque además de asegurar que los resultados eran definitivos y la técnica no invasiva e indolora, estaba acompañada de una caja de bombones que aseguraban que no tendría por qué abandonar… ¡Demasiado para mi!
Te animo a descubrir cómo funciona LLA (Láser Lipolítico Adelgazante), que es el nombre del tratamiento que seguí, y cómo fui tratada como una reina en el centro de Aurora Sabater, de Barcelona.
Ah!!, por cierto, la de la foto no soy yo…
Tengo que reconocer que me dirigí al centro de Aurora Sabater con toda la ilusión del mundo y animada a hacer todo lo que me indicasen.
Normalmente los salones de belleza invitan a las periodistas de belleza a realizar una sesión de sus nuevos tratamientos para que conozcamos el protocolo y comprobemos cómo funciona con una sesión. Y ese es el problema (que a más de una le gustaría tener, ¡¡¡no me voy a quejar!!!) que sólo realizamos una sesión y no podemos comprobar cómo funcionan los tratamientos después de todas las sesiones recomendadas.
En esta ocasión el compromiso era importante. La empresa distribuidora de LLA invitó a unas pocas periodistas a realizar todo el tratamiento, 10 sesiones, para que pudiésemos evaluarlo «con todas las de la ley».
No quiero darte datos técnicos de qué es LLA, para eso es mucho mejor que entres en este enlace, yo sólo te quiero explicar mi experiencia, sin tecnicismos.
Mi grasita, LLA y yo
Empecé el tratamiento el 29 de junio y repetí las sesiones una vez por semana religiosamente. Bueno, tengo que reconocer que falté a la última sesión que me he hecho después de las vacaciones, y eso me ha servido para mi evaluación final. Pero no adelentemos los hechos…
El tratamiento con LLA se realiza por zonas por eso, tras rellenar un cuestionario con mis datos personales, enfermedades, medicación, etc., lo primero que me preguntaron las técnicas del equipo fue qué zona deseaba adelgazar. Después de reflexionar unos instantes (¡tengo muchas zonas susceptibles de adelgazar!) les comenté que me molestaba mucho la grasita de la espalda, sí, aquella que tenemos por la zona del sujetador.
Coincidieron conmigo y me comentaron que si alcanzábamos nuestro objetivo antes de finalizar las 10 sesiones podría «invertir» las sobrantes en otra zona: ¡bravo!
Me descalce, me desnudé y empezaron a tomarme medidas. ¡Horror!
Para que éstas fuesen siempre las mismas tomaron referencia de los puntos a tratar desde el suelo hasta mi cuerpo y me señalaron con un lápiz las zonas de control. Me pidieron que pusiera las manos sobre la nuca y me midieron.
A continuación me aplicaron un gel en la zona a tratar y me colocaron la banda con los láser en la zona que quería adelgazar. Diez minutos después y sin sentir ningún tipo de molestia, me quitaron la banda y me invitaron a medirme de nuevo. Los resultados fueron inmediatos. En total, había reducido 3 centímetros repartidos en los diferentes puntos que me habían tomado.
Me vestí con una amplia sonrisa dibujada en mis labios.
La esteticista me dijo que durante 24 horas no debía tomar hidratos de carbono y además debía realizar algo de ejercicio, así que fui hasta mi casa caminando, total 47 minutos de un paso rápido y enérgico. También me indicaron que para las próximas sesiones no debia comer hidratos de carbono durante las 24 horas anteriores y posteriores al tratamiento. Después sólo era necesario utilizar la lógica y comer de forma razonable.
No te preocupes. No te voy a explicar uno a uno todos los días que fui al centro de Aurora Sabater a segur el tratamiento, porque siempre era el mismo ritual. Lo que sí te quiero decir es que cuando me tomaban las medidas antes del tratamiento mantenía las últimas de la sesión anterior (y eso que en alguna ocasión no me porté tan bien como debería haber hecho…) y que llegué a mi objetivo de eliminar las grasitas de la espalda con sólo 4 sesiones. El resto las dediqué a la zona de la barriga y las caderas.
Como te he dicho, la última sesión no la pude realizar. La he hecho ahora, hace sólo unos días, y la gran satisfacción es que, incluso después de los pecaditos veraniegos, ¡¡había mantenido las medidas de mi última sesión!!
Si deseas deshacerte de los kilos de más ganados este verano puedes entrar en este enlace y descubrir el más cercano a tu casa. Seguro que te tratarán tan bien como me trataron a mi en el centro de Aurora Sabater y seguro que obtendrás los mismos buenos resultados que yo!