¿Cuánto tiempo duran los cosméticos? Descúbrelo aquí y en nuestra colaboración radiofónica en RAC1

 

Con la llegada del sol desempolvamos la bolsa de la playa y descubrimos aquel protector solar que nos quedó a medias el verano pasado. Nos lo miramos, no sin cierto recelo, y lo olemos para ver si descubrimos algún indicio que nos diga si está en condiciones de ser utilizado o tenemos que tirarlo… Nos debatimos… nos costó un dineral y ¡aún queda más de la mitad…! ¿que debemos hacer? ¿cuánto tiempo duran los cosméticos? Te lo explicamos en esta entrada y también en nuestra colaboración mensual en el programa Via Lliure de RAC1 en la que también hablaremos de los autobronceadores. Si quieres oir la sección sólo tienes que pinchar en el enlace: Belleza Activa en Via Lliure.

Una de las dudas más habituales cuando llega el buen tiempo es si pueden usar los protectores solares sobrantes del año pasado. La respuesta es que si se han abierto, los productos deben tirarse porque sus cualidades pueden haberse degradado por diversos factores como el contacto con el aire, los dedos, la arena, el sol … Si utilizamos un protector solar del año pasado los filtros con que están formulados y nos protegen del sol pueden haber perdido eficacia y ya no nos protegen como es debido, además nos pueden producir alergias o reacciones adversas por las contaminaciones que hemos mencionado anteriormente. Y todo esto nos lleva a hablar de la caducidad de los cosméticos.

De la misma forma que los productos alimenticios perecederos tienen una fecha de caducidad o de consumo preferente, desde hace ya algunos años los productos cosméticos también disponen de una fecha que nos indica el tiempo durante el cuál se puede utilizar sin riesgo, se llama PAO y responde a las siglas inglesas de “Periodo después de abierto” (Period After Opening).

Símbolo PAO

El PAO se expresa en forma de uno o dos dígitos acompañados de la letra M, todo ello dentro de un dibujo en forma de tarro de crema abierto. Con esos símbolos se indica el número de meses durante los cuales se puede utilizar sin riesgos el producto una vez está abierto, o que mantiene todas sus indicaciones sin disminución de su eficacia. Si se puede utilizar durante tres meses en el dibujo del tarro, aparecerá 3M, si es durante un año y medio aparecerá 18M, y así hasta 36M, pues los productos que por su formulación o presentación no supongan ningún riesgo más de treinta y seis meses después de abierto, no tendrá que llevar dicha inscripción. El símbolo del PAO aparece en el tarro y, si lo lleva, también en el estuche o envoltorio.

Todos los detalles del PAO

Que un producto tenga un PAO u otro irá en función de su formulación (principios activos, conservantes, etc.) y también de su presentación (tarro, spray, air-less) En todo caso será únicamente el fabricante quién decidirá cuántos meses puede ser utilizado el producto sin ningún riesgo para el consumidor. Esa fecha será fijada también en función de los test y análisis de estabilidad efectuados por el fabricante antes de su comercialización.

Algunos productos se deterioran porque pueden ser contaminados por microorganismos al entrar en contacto con los dedos o el aire o porque pueden tener ingredientes que se deterioren con el paso del tiempo. La utilización de productos después de su PAO puede suponer un riesgo o un daño para el consumidor porque puede afectar a la eficacia del producto, como por ejemplo en el caso de los filtros solares.

Algunos ejemplos de PAO

Los cosméticos en envase airless no tienen por qué incluir una cifra PAO

Como hemos dicho, el que un producto tenga un PAO u otro irá en función de su presentación y formulación, y siempre será fijado por el fabricante, sin embargo, como idea general, se puede considerar que:

Fecha de caducidad y PAO

El PAO indica el periodo de tiempo en el que un producto cosmético puede ser usado de forma segura tras haber sido abierto. Es de aplicación a los productos que tienen una fecha de caducidad superior a 36 meses y que, por tanto, no tienen obligación de indicarla.

La fecha de caducidad indica el límite de tiempo que dispone el consumidor para utilizar el producto desde la fecha de fabricación.

Salir de la versión móvil