La pastilla de jabón tradicional recupera su espacio en el baño gracias a una apuesta firme: la elaboración artesana con ingredientes naturales. Porque, en el fondo, sigue siendo el aroma de nuestro hogar.
Después de unos años en que el jabón líquido se impuso en la higiene corporal, manos incluidas, hoy la pastilla de jabón recupera su lugar destacado en el baño. Y es que, además de ser más económica, aparecen en el mercado jabones que son auténticas tentaciones, golosas y muy nutritivas para la piel.
Un jabón debe limpiar la piel, por supuesto, pero también debería mantener su humedad, contribuir a nutrirla y evitar irritaciones y reacciones alérgicas. Pero lo cierto es que muchos jabones industriales consiguen exactamente lo contrario: empiezan por resecar la piel y, en algunos casos, la irritan y alteran. Ésta es una de las razones por las que se abandonó hace años el uso de la pastilla de jabón para la higiene corporal en favor de los geles de baño, mucho más suaves y espumosos.
Pero esto ha cambiado. La recuperación de la elaboración de jabones artesanos, elaborados con aceites vegetales como el de oliva o coco, ha supuesto un retorno a la clásica pastilla de jabón. Y es que estos jabones son suaves y respetuosos con la piel y pueden ser empleados tanto en el cuerpo como en el rostro, habitualmente sin causar problemas de sequedad o irritación cutánea. La razón es sencilla, pero poco conocida: el jabón elaborado de forma tradicional mantiene todos los elementos grasos, entre ellos la glicerina, un valioso hidratante y suavizante para la piel. En cambio, en los procesos industriales de elaboración del jabón, esta glicerina, muy valiosa, suele ser extraída para incorporarla a otros productos cosméticos e, incluso, a algunos tipos de jabón.
Además de haber perdido parte de sus activos grasos, también la procedencia de la grasa es importante. Las grasas de origen animal (sebo), más baratas que las vegetales, no son tan respetuosas con la piel y producen en general poca espuma, por lo que en los procesos industriales deben agregárseles otras sustancias, sintéticas o naturales, que pueden producir alteraciones cutáneas.
En los últimos años han tomado protagonismo empresas que elaboran jabón de forma tradicional. Es el caso de algunas pequeñas marcas que se han convertido en referentes en todo el mundo gracias principalmente a sus productos y sus efectos, pero también a sus apariciones en la prensa, su estrecha relación con algunas caras famosas y la facilidad de obtenerlos pese a su exclusividad, ya sea a través de internet o de algunas grandes cadenas.
Se afirma, por ejemplo, que la cantante Madonna es una fan de los jabones de Gamila, nombre de una mujer drusa que vive en Galilea y que creó una marca de jabones 100% naturales. En España se encuentran algunas de estas empresas, como Los Jabones de Mi Mujer, que elabora sus jabones cien por cien naturales en la Sierra de Guadarrama (Segovia), en plena naturaleza, con una base de aceite de oliva virgen extra e ingredientes propios de la zona, como el tomillo o el romero.
Bara Cosmetics es otra marca española que elabora cosmética natural, entre ella jabones. Aunque en este caso sus ingredientes pueden proceder de otras partes del mundo, todos sus productos son aptos para vegetarianos y algunos para veganos. Además, también podemos encontrar jabones naturales con facilidad procedentes de Siria, Letonia o el sur de Francia, con su clásica receta del jabón de Marsella.
Y, siempre atenta, la industria cosmética ha tomado buena nota de esta tendencia y presenta ya jabones sueñes, emolientes y respetuosos con la piel que se elaboran de forma parecida a la artesanal.
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Elaborar el propio jabón es un proceso relativamente sencillo, aunque sí hay que tener especial cuidado de realizar la mezcla en un lugar ventilado para evitar que la sosa dañe la piel, los ojos o las mucosas, ya que es una sustancia muy corrosiva. Se puede fabricar jabón mezclando aceites o manteca usados, por lo que es una opción ecológica y muy adecuada en tiempos de crisis. Aunque, obviamente, es mucho mejor utilizar aceite limpio.
Se mezcla agua con sosa cáustica (medio kilo por cada tres litros de agua), que se añade lentamente y se remueve hasta su disolución. Se añade entonces el aceite (3 kilos) poco a poco, batiendo siempre en la misma dirección, hasta que queda una pasta densa pero moldeable. Una vez ligado, puede añadírsele alguna sustancia aromática, hierbas, aceites esenciales, etc. Se coloca en moldes y se deja secar cuatro o cinco días. Conviene cortarlo cuando aún está un punto blando, ya que una vez seco se romperá.
Este proceso, que antiguamente se realizaba un par de veces al año en los hogares de todo el mundo cuando el jabón era un elemento de elaboración propia, es una de las reacciones químicas más conocidas y recibe el nombre de saponificación.
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• Jabón de Té Verde de Los Jabones de Mi Mujer. Jabón nutritivo elaborado con aceite de oliva virgen extra, manteca de karité, aceite de té verde y extracto de té blanco y té verde matcha en polvo. Hidratante y antioxidante, está indicado para todo tipo de pieles, así como para las más delicadas y con problemas como psoriasis, acopia, dermatitis y pieles envejecidas. 100g 11,12€
• Jabón de Cáñamo de The Body Shop. Contiene aceite de semilla de cáñamo, muy nutritivo ya que contiene niveles de ácidos grasos omega 3 y 6 mayores que cualquier otra planta conocida, así como vitaminas A, E y B-12, ácido cólico., magnesio, potasio y hierro. Indicada para pieles delicadas. Incluye una cuerda para poder colgarlo y evitar que ensucie, se deshaga o adquiera bacterias al dejarlo en la bañera o la jabonera. 8€
• Jabón Tradicional Bonne Mère Lavanda de L’Occitane. El clásico jabón de Marsella, suave y emoliente, con aroma a lavanda. 100g 4€
• Bosque Encantado de Bara Cosmetics. Jabón artesanal con enebro y aceite de aguacate, con un 89,53% de ingredientes de origen natural. El enebro es antiséptico y balsámico, recomendado para tratar la piel grasa y otras afecciones, y el aceite de aguacate es suavizante y nutritivo. 100g 4,05€
• Karma de Lush. Jabón icónico de la marca inglesa, se moldea a mano en discos que después se cortan y venden a peso. Contiene aceites de coco y colza, asi como de pachuli, naranja dulce, lavanda, pino, elegí y extracto de gardenia. 100g 5,95€
• Pastilla de Jabón de Rosa de Dr. Bronner’s Magic Soaps. La marca de Estados Unidos elabora desde hace años sus jabones con ingredientes 100% orgánicos certificados, aptos para vegetarianos y veganos. 140g 5€
• Nº5 Le Savon de Chanel. Jabón perfumado para el cuerpo con la fragancia del mítico perfume. 150g 25,50€