Si sientes que no te cierra el pantalón, que aquel vestido que siempre te había sentado como un guante te ajusta demasiado, si te pones ante el espejo y ves que has engordado, tal vez tienes que plantearte si realmente tienes sobrepeso o retención de líquidos.
En muchas ocasiones, el doctor Moisés Martín no tiene más remedio que sacar del equívoco a algunos pacientes que se dirigen a su consulta para adelgazar. Eso sucede, como nos ha explicado, sobre todo en las pacientes más jóvenes, que confundan el aumento de peso con la retención de líquidos. No obstante no es demasiado mejor sufrir retención de líquidos que tener sobrepeso.
Si la retención de líquidos va asociada con una vida sedentaria y, además, con un verdadero problema de sobrepeso, esa retención de líquidos puede llegar a convertirse en un problema de salud importante.
Cosa, mayoritariamente, de mujeres
Aunque la retención de líquidos está relacionada con la poca ingestión de éstos (el organismo retiene aquello que recibe en poca cantidad), existen otros factores importantísimos. Según nos explica el doctor Martín, la retención de líquidos afecta, sobre todo, a las mujeres y está íntimamente ligada a la producción de hormonas como la progesterona y los estrógenos. Estas hormonas influyen el proceso mediante el cual los vasos sanguíneos vierten líquidos sobre los tejidos. La retención se produce cuando el proceso no es de retorno y el líquido se queda estancado. Sin embargo existen más factores que inciden en la retención de líquidos:
- Problemas circulatorios, que surgen cuando la sangre no fluye correctamente por las venas de las extremidades inferiores.
- El calor, que agrava el problema circulatorio.
- El consumo excesivo de sal.
- La vida sedentaria.
- La ingesta de algunos medicamentos, antidepresivos, por ejemplo, pueden fomentar la retención. También los anticonceptivos hormonales.
- Por supuesto, durante el embarazo la retención de líquidos resulta común, aunque es cierto que conviene mantenerla controlada.
¿Cómo saber si tengo retención de líquidos y cómo acabar con ella?
Las personas que sufren retención de líquidos tienen zonas de su cuerpo más hinchadas que otras, como tobillos, pies y piernas. Por la noche, la hinchazón aumenta, ya que al estar tumbados tantas horas seguidas el líquido se redistribuye y sitúa en las zonas de piel más laxas. Los párpados son una de ellas.
El doctor Martín Anaya recomienda «ejercicio en primer lugar y una alimentación equilibrada, rica en elementos diuréticos, que facilitan la eliminación de líquidos: piña, pera, alcachofa, etc. También beber mucho agua, al contrario de lo que sugiere la creencia popular».
Pero, sin duda, las grandes mejoras a corto plazo se obtienen gracias a la aparatología y las técnicas de drenaje manual.
Tanto el doctor como nosotras te recomendamos el drenaje linfático. Se trata de un masaje manual especialmente indicado para el tratamiento de la retención de líquidos y resulta óptimo para atacar, a la vez, a la temida celulitis. Favorece la reabsorción y drenaje de los líquidos y toxinas retenidas a nivel del tejido conjuntivo. De esta forma su efecto se deja notar sobre la piel activando la circulación y mejorando la microcirculación. ¡Pero cuidado!, no todo el mundo está capacitado para hacer correctamente el drenaje linfático manual. Debes ponerte en manos de un/una buena profesional que esté formada y acreditada para realizarlo.
En cuanto a las máquinas, la presoterapia ofrece grandes resultados en pocas sesiones: es una técnica que se basa en el masaje que ayuda a aumentar la circulación de los líquidos retenidos, mejorando la circulación sanguínea, el aporte de oxígeno a los tejidos y eliminando las toxinas acumuladas. Existen máquinas de presoterapia que sólo trabajan en las piernas con unas grandes bontas que cubren las piernas desde las ingles hasta los pies, sin embargo existen otros equipos que cubren también el vientre e, incluso los brazos.
Existen también preparados a base de plantas que ayudan a drenar el organismo y evitar la retención de líquidos. Tal es el caso de:
Fitoconcentrado Diente de León, de Aboca. Concentra todas las sustancias funcionales presentes en la raíz de esta planta, utilizada tradicionalmente por sus propiedades drenantes. La rigurosa selección de la materia prima, los controles de calidad sistemáticos y comprobaciones analíticas de laboratorio durante todo el proceso de fabricación garantizan la máxima calidad del producto. Su precio: 12,90€/50 cápsulas.
Arkofluido, de Arkopharma. Contribuye a drenar el organismo gracias a su formulación a base de alcachofa, de acción diurética, desintoxicante y depurativa. También facilita la digetión de las grasas y digestiva, por lo que ayuda a controlar el peso. También contiene hinojo, mate y uva. Su precio: 20,90€/20 unidosis.