Escoger el champú adecuado es fundamental para conservar el cabello sano y bonito. Sin embargo, no es lo único importante: lavarlo bien tiene su truco, aunque parezca sencillo. Te contamos en 10 puntos cuál es el paso a paso ideal.
- Cepilla el cabello antes de lavarlo para eliminar restos de laca, espumas, etc.
- Humedece el cabello completamente en agua tibia, porque muy caliente abre demasiado los poros y se reseca en exceso. Moja bien tanto el cuero cabelludo como el cabello antes de aplicar el champú.
- Vierte un poco de champú en la palma de la mano. La cantidad adecuada es el tamaño de una nuez, que permite crear espuma suficiente para todo el cabello.
- Extiende el champú en diferentes zonas de la cabeza con la yema de los dedos y, con la otra mano, emulsiona en movimientos circulares para que el champú llegue a todo el cuero cabelludo. No debe frotarse nunca el cuero cabelludo y aún menos con las uñas. El orden es el siguiente:
- Parte superior de la cabeza
- Laterales de la cabeza
- Coronilla y zonas medias
- Puntas y nuca.
- Un masaje suave es suficiente. El cabello debe caer de un modo natural. Nunca debe friccionarse ni la raiz ni las puntas.
- Aclara muy bien el cabello dejando que el agua corra a través de él.
- Tras el lavado, es muy importante aplicar un acondicionador. Éste funciona como escudo evitando que el cabello se rompa al desenredarlo con los dedos o el peine. Debe aplicarse por todos los mechones de cabello, desde las puntas hacia arriba. Deja actuar unos minutos. En las puntas hay que aplicar siempre doble cantidad de acondicionador. Aclara bien el cabello dejando que el agua corra mientras lo acaricias, para eliminar todo el cosmético.
- Las mascarillas intensivas aportan al cabello una hidratación y un cuidado extra. Se recomienda empezar el tratamiento dos o tres veces por semana y, posteriormente, aplicarlas una vez a la semana. Es muy importante dejar que actúen el tiempo recomendado. Aclara abundantemente para que no queden restos.
- Con una toalla limpia, debemos presionar el cabello suavemente para secarlo, evitando frotarlo. No ha de cepillarse nunca el pelo cuando aún está húmedo. Peina el cabello desde la mitad de la melena hacia las puntas.
- Utiliza el secador después de haber quitado la humedad del pelo con una toalla: nunca cuando el cabello aún chorrea. Seca bien la raíz del pelo, especialmente en la nuca, para evitar que la humedad abra la cutícula y lo deje desprotegido. ¡Tu cabello está listo!