¿Has decidido ya cómo vas a peinarte para fin de año? Si aún no lo tienes claro, te ofrecemos algunas propuestas festivas y glamourosas para que seas el centro de todas las miradas.
Sin duda, lo que más llama la atención son siempre los recogidos. Desde el sencillo moño de bailarina, como el que propone Cebado, a los trenzados y volúmenes esculpidos en desmesura de Raffel Pages. De éste nos ha encantado sus dos nuevas tendencias para este invierno, Opulence y Caravansary. La primera, muy elegante e impactante, la define el peluquero con estas palabras: «La opulencia entra en escena, la conquista del placer, el culto a la belleza, el glamour que renace en los clásicos, en un nuevo barroco lleno de sensualidad, en códigos burgueses que vuelven a brillar… esplendor, sensualidad, misterio… déjate llevar por esta exagerada feminidad y el deseo de seducir!». Tal como explica Raffel Pagès, «los cabellos se rigen por volúmenes audaces y equilibrados. Recogidos muy elaborados y altos, siempre para potenciar esta estética desbordada de refinamiento y seducción».
Caravansary, por su parte, está inspirada en la palabra caravansar, que deriva del persa y el turco y se refiere a los albergues o refugios para los comerciantes de la ruta de la seda, y en ella «el cabello se vuelve libre, natural y salvajemente controlado, se mueve como una silueta nómada-explica Pagès-. Las texturas son secas, hinchadas y voluminosas en las melenas, los trenzados vuelven a ganar protagonismo junto a los recogidos con volúmenes esculpidos y los cortes van a favorecer la naturaleza del cabello buscando y potenciando sus formas naturales. Los cabellos abrazan una calidez extrema y el color clave de esta temporada se instala en toda la gama de cobres, desde los rubios venecianos hasta los tonos albaricoque, tonos de cabellos intensos y cálidos que aportan un extra de energía y vitalidad». Dos propuestas igualmente exuberantes y muy extremas que requieren del paso imprescindible por la peluquería.
Desde Cebado explican que «los recogidos son un clásico que año tras año aparecen como propuesta para las fiestas y van desde las trenzas y las colas con efecto despeinado más casuales para las mujeres más jóvenes a las que les gusta peinarse pero no romper con su aire rebelde, hasta los recogidos que nos recuerdan los clásicos “dobles italianos” para las mujeres más clásicas. Lo más importante sin duda es sentirse cómoda con la imagen que una muestra. Volúmenes discretos en la zona de la nuca buscando formas naturales y elegantes para las mujeres a las que gusta lucir un recogido especial durante las fiestas». Respecto a la tendencia estrella de los últimos tiempos, las trenzas, explican que «las vemos en todos los tamaños y formas y abarcan desde trenzas de lechera retorcidas alrededor de la parte superior de la cabeza, hasta los estilos que incorporan dos trenzas simples bajas. Todas aquellas combinaciones que se nos pasen por la cabeza son validas para una noche especial». También «los accesorios como son las bandas de cuero y los broches grandes para el cabello en colores oscuros actualizan los recogidos simples y los estilos sueltos, aportando otro aire a los peinados», algo que también vemos en las propuestas de Yolanda Aberasturi para L’Oréal Professionnel.
Por último, si el cabello es medio o corto, por tanto, difícil de recoger, Cebado propone aportar un aire sofisticado con productos de styling y una buena técnica de secado, que «nos ayudaran a conseguir que una media melena se muestre con aire chic, pegando más un costado que el otro y otorgando distintos volúmenes». Nos gusta también la propuesta de Montibello, que juega con las extensiones y el color en un cabello corto.
La peluquera bilbaína Yolanda Aberasturi presenta un moño bajo deconstruido, que por delante parece un falso bob, como recogido, y ofrece dos propuestas más muy llevables y efectistas: una larga melena ladeada con ondas al agua, al estilo Rita Hayworth, fijada con un gran broche, y un corto sexy con un tupé encrespado que juega con dos colores (cobre y bronde) para potenciar aún más el efecto volumen.