El proceso de descubrir cuál es tu base de maquillaje ideal es largo y pasa por probar mil y un cosméticos. En el camino sufrimos pequeños enamoramientos de algunos productos, que se convierten en nuestros aliados, hasta que el hechizo se va y los sustituimos por otros. En nuestra elección, también influyen los pequeños pecados en maquillaje que comete cada cultura. Por ejemplo, en los países mediterráneos solemos usar colores demasiado oscuros, con el propósito de parecer más morenas, lo que hasta el año 2000 era un indicador de consumo o status.
Así que la mayoría de las mujeres nos sentimos un poco perdidas en el momento de escoger el tono que más nos favorece. Para salvarnos está Claudia di Paolo, beauty hunter, quien nos da las claves aprender a escoger el tono ideal para nosotras. ¿Qué hay que tener en cuenta?
- Color de piel: la primera clave en esta elección es ser realista con nuestro verdadero color de piel. Para pieles blancas se recomiendan los tonos rosados, y para las morenas, los dorados.
- Escoge un tono menos y opta por la naturalidad: contradice el vicio mediterráneo de autobroncearse en exceso y elige una base de maquillaje un tono más claro que el tuyo natural. El objetivo es que tu rostro desprenda libertad y naturalidad.
- Rubias, morenas, castañas o pelirrojas: el color del cabello también nos puede indicar qué tonalidad nos quedará mejor. Las morenas deberían optar siempre por gamas más oscuras que las rubias y pelirrojas.
- Para la prueba: si realmente queremos encontrar nuestra base ideal, es fundamental que lo probemos con el rostro limpio (sin restos de maquillaje previo) y que comparemos el tono en la zona del mentón con el de la cara.
- La textura: las bases menos densas tienen un efecto más sencillo, mientras que las “mousses” o los maquillajes en barra tienen un efecto de mayor cobertura, por lo que oscurecen más las facciones de la cara.
- La estación: es evidente que nuestro color de piel cambia durante el año: el bronceado del verano dista mucho de la blancura del invierno. Por eso, puedes utilizar una base para cada estación, usando tonos más claros en invierno y más cálidos en verano.
Nosotras te proponemos:
Lingerie de Peau, de Guerlain. Esta base acaba con el desfase entre vernos maquilladas y desmaquilladas, gracias a un acabado de segunda piel, que embellece nuestro rostro sin artificios. En la búsqueda de la deslumbrante naturalidad, Guerlain ofrece tres subtonos con una escala de seis grados de intensidad para cada uno, que pasan de la tez de porcelana a la de ébano. Además, protege la piel de los rayos solares con el SPF 20. Su precio: 54,80€
Les Beiges Teint Belle Mine, de Chanel. Maquillaje fluido que sonroja los pómulos y tiñe de luminosidad nuestro rostro es la gran apuesta de la maison por la belleza natural. La fórmula contiene SPF 25 y consigue un acabado impecable, fresco y mate, adecuado para todas las estaciones. Su precio: 48€
Teint Idole Ultra Compact, de Lancôme. Es el primer compacto de Lancôme que proporciona un efecto mate extremo y de larga duración, gracias a su tecnología «Eternal Soft» y a su alta concentración en Perlita. La sensación de confort sobrevive al paso de las horas, mientras que el rostro se mantiene luminoso y sublime. Su precio: 46,50€
Diorskin Forever Fluid Foundation, de Dior. Fondo de maquillaje fundente y no graso proporciona una corrección homogénea a nuestra piel con un acabado mate que invisibiliza parcialmente los poros y que resiste 16 horas. El fluido se adapta al contorno del rostro, gracias a la combinación de dos polímeros «wear lock»: el acrílico fija la materia y los pigmentos, mientras que el polímero hidraformulado aporta flexibilidad al maquillaje. Su contenido de SPF 35 protege nuestra tez del impacto de los rayos solares. Disponible en 12 tonos.
Le Cushion Encre de Peau, de Yves de Saint Laurent. Con un aplicador en forma de borla y la revolucionaria esponja «ink-in-cushion», este maquillaje se adapta perfectamente a la piel para proporcionar una cobertura perfecta y un acabado mate- luminoso e impecable. Se trata del primer fluido con acabado mate de la marca y está desarrollado a partir de pigmentos recubiertos de una gran intensidad de color, que se funden con la piel para obtener un resultado perfecto. Su precio: 58,80€.
Fresher Skin Foundation SPF15, de Rimmel. Esta base de maquillaje transpirable y natural se transforma al entrar en contacto con nuestra piel, pasando de ser un gel de agua a una crema refrescante, gracias a su tecnología « quick – break» . Su fórmula contiene minerales naturales en polvo que ayudan a absorber el exceso de grasa y a controlar el brillo durante horas (proporcionando un acabado natural y mate gracias a su resistencia al sudor y a la humedad), mientras que los extractos de aloe vera, manzanilla y las algas marinas suavizan la piel. Además, contiene SPF 15 para proteger nuestra tez de los efectos dañinos del sol. Su precio: 7€.
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