Aunque solemos apañarnos con dos o tres –que nos son más cómodos– lo cierto es que hay de muchos tipos de brochas y pinceles de maquillaje. Conocerlos todos es una ardua tarea que dejaremos reservada a los maquilladores profesionales (¡tranquila!), pero nunca está de más descubrir algún que otro truquillo para elegir aquellos que más se adapten a nuestras necesidades y nos permitan conseguir mejores resultados.
Consejos para un maquillaje 10
Lo primero que debes tener en cuenta es el tipo de pelo. Las brochas de pelo natural son perfectas para aplicar productos en polvo, mientras que las de pelo sintético, que absorben menos producto, están indicadas para productos cremosos, como correctores o bases. También hay brochas mixtas, que se pueden usar tanto para bases fluidas como para polvos.
La forma de la brocha dependerá de la zona del rostro que quieras maquillar. Por ejemplo, las bases líquidas se aplican mejor con brochas planas y de pelo sintético. En cambio, para los polvos es mejor que uses brochas redondeadas, anchas y de pelo natural. Además, para el colorete te irá muy bien que sea biselada (con corte en diagonal), ya que ayuda a darle forma al pómulo y marcarlo más, para esculpir tu rostro.
Para aplicar las sombras de ojos los pinceles deben ser de pelo denso y cortadas en ángulo. Para difuminarlas, puedes usar uno de cerdas más largas y pelo natural ya que, cuanto más larga es la cerda, menos intensa es la aplicación.
En cuanto al corrector, existe un pincel específico de forma plana, que permite aplicarlo de manera precisa en zonas determinadas, para corregir las imperfecciones, ojeras, asimetrías, etc. También sirve para iluminar aquellas zonas en las que queremos aportar luz.
Para perfilar y maquillar los labios se puede utilizar el mismo pincel de eyeliner, pues su punta final puntiaguda es perfecta para trazar diseños concretos.
Cuida de tus brochas
¿Cuándo fue la última vez que limpiaste tus brochas y pinceñes? Si la respuesta es ‘Nunca’ o ‘Ni me acuerdo’, te recomendamos que leas con atención. Y es que las brochas acumulan los aceites de los productos, el sebo y las impurezas de la piel, y otros restos de suciedad que no solo acortan su vida, sino que pueden causarnos problemas en el cutis, como granitos, puntos negros o irritaciones.
Lo ideal es limpiarlas cada 10 días aproximadamente si nos maquillamos a diario, y con mayor frecuencia las que utilizamos para productos fluidos. Así evitaremos la aparición de bacterias y el exceso de producto.
Para lavarlas, hay que usar agua templada y un jabón suave o champú. A continuación, debemos enjuagarlas bien y retirar la humedad ejerciendo un poco de presión con una toalla. Es importante no colocarlas boca arriba, ya que el agua podría llegar a la férula y debilitar el pegamento que sujeta el cabezal de la bocha con el mango. Por eso, lo mejor es ponerlas en horizontal, en un lugar ventilado y con suficiente espacio como para que estén separadas.
Si están muy sucias, porque eso de limpiarlas no se te había pasado por la cabeza, puedes empezar introduciendo la punta de las brochas (¡solo la punta!) en un recipiente con agua y alcohol y déjarlas reposar un rato; verás cómo ya van soltando producto. A continuación, lávalas cómo te hemos explicado. Y si te falta tiempo, también puedes utilizar alguno de los productos específicos para la limpieza de brochas y pinceles que comercializan muchas marcas.
Nuestras propuestas
- Brocha para maquillaje Face Brushes, de Guerlain. Con su diseño de forma alargada y cerdas firmes pero suaves , permite aplicar las fórmulas de maquillaje fluido con una película fina, uniforme y perfeccionadora de la tez.
- Parisian Kabuki, de Lancome. Mini brocha diseñada para aplicar la cantidad exacta de colorete o iluminador en tan solo un gesto. Su precio: 35€
- Pincel angular para colorete, de QVS. Un pincel que define unos pómulos preciosos. Ayuda a crear ángulos y sombras en el lugar preciso.
- Tropic Heat Face Brush, de KIKO. Gracias a sus suaves cerdas sintéticas, aplica de manera fácil y homogénea todo tipo de polvos para el rostro. Forma parte de la nueva colección cápsula de KIKO, firmada por los diseñadores emergentes Leitmotiv. Su precio: 10,95€
- Brocha correctora, Tweezerman. Específica para las áreas problemáticas, rojeces, manchas, líneas de expresión o pliegues. Su precio: 15€
- Pinceau Duo Paupiéres Retractable, de Chanel. Pincel para ojos retráctil, perfecto para aplicar sombras y para difuminarlas. Su precio: 46€
- Limpiador de brochas, de Beter. Un limpiador para pelo sintético y natural, con agentes antisépticos y acondicionadores. Sin aclarado y de secado rápido. Su precio: 8,85€
[Fotografia principal: ©Chanel]