Hace ya algunas semanas descubrimos los tratamientos faciales en cabina de La Prairie. Los cosméticos ya los habíamos probado y nos habían encantado, pero por una cuestión o por otra, no habíamos entrado en una cabina de belleza La Prairie. ¡Y eso ya no lo podemos decir! y lo que es mejor: ¡No será la última vez! La experiencia fue, sencillamente, ¡fantástica!
A principios de junio, Tamara Gómez –responsable de relaciones públicas de La Prairie– invitó a la prensa profesional a la inauguración del espacio de la marca en El Corte Inglés de la Avenida Diagonal de Barcelona.
Como complemento a la visita, la prensa fue invitada a descubrir los protocolos de belleza de La Prairie en la cabina que tienen en el mismo corner de los grandes almacenes. ¡Y nosotras no nos lo quisimos perder para explicártelo!
Antes de iniciar el tratamiento, la imprescindible pregunta de Isabel Bello, la experta esteticista de la marca: ¿Qué es lo que más te preocupa de tu piel? Llega el caos a tu cabeza: ¡todo, me preocupa todo!, la falta de firmeza, la falta de luminosidad, las demasiadas arruguitas, las demasiadas rojeces de mis mejillas que me hacen parecer Heidi… Pero en La Prairie tienen una línea maravillosa y milagrosa que se llama Platinum, que tiene un apellido revelador: Rejuvenecedora. ¿Hace falta que explique más?
Así fue el tratamiento Platinum de La Prairie
Tras desmaquillar y limpiar mi rostro, Isabel me realizó una exfoliación y a continuación aplicó una mascarilla adecuada a mis necesidades.
Como uno de los problemas que más me molesta son las rojeces faciales, masajeó mi rostro con un aceite para apaciguarlas. Aunque normalmente, cuando te manipulan la cara, la piel aumenta de temperatura y enrojece, en este caso no sucedió, como pude comprobar con el espejo que me ofreció Isabel. Mi piel tenía un tacto fresco y sensación relajada.
Con la mascarilla sobre el rostro, Isabel aprovechó el tiempo realizándome un masaje de manos con la crema de manos y la crema de caviar, que tiene efecto tensor, reafirmante y además suavizante.
Tras eliminar la mascarilla, un masaje en el contorno de los ojos con el sérum de la línea Platinum. Éste posee un efecto tensor y reafirmante. Además aporta luminosidad a esta zona del rostro, pero trabajándola internamente. Seguidamente insitió sobre la zona del contorno de los ojos con la crema de Platinum.
Ahora ya sobre el rostro, la el sérum y la crema Platinum y la crema de cuello rejuvenecedora, que tensa, reafirma y reduce el doble mentón. ¡Otro punto flaco!
Finalmente aplicó la crema con color y SPF 30 de la línea Swiss Cristal, de efecto mate.
Ni que decir tiene que salí de la cabina absolutamente flotando, y con una buena cara que no tenía desde hacía muchísimo tiempo.
Decirte, que el efecto tensor y de suavidad y luminosidad en mi piel duró varios días. Sin duda un excelente tratamiento rejuvenecedor, y unas magníficas manos las de Isabel.
Así es la línea Platinum de La Prairie…
• Platinum Rare Cellular Eye Essence: ayuda a disminuir las arrugas, tensa y reafirma visiblemente, e ilumina el aspecto de las ojeras.
• Platinum Rare Cellular Eye Cream: Platinum Rare Cellular Eye Cream es un poderoso tratamiento para la delicada zona de los ojos. Los ojos se elevan y se iluminan, a la vez que se reducen las líneas de expresión y la sensación de hinchazón. Los ojos se muestran rejuvenecidos, con una belleza atemporal.
• Platinum Rare Cellular Serum: Cellular Serum Platinum Rare de La Prairie es simplemente extraordinario. Solo unas cuantas gotas de este innovador sérum de rejuvenecimiento ayuda a restaurar la barrera natural de hidratación de la piel, por lo que se mejoran la hidratación y protección. El resultado es una piel reafirmada, iluminada y rejuvenecida.
• Platinum Rare Cellular Cream: Una experiencia transformadora extraordinaria. Esta nutritiva crema, el lujo en su máxima expresión, combate los signos visibles del envejecimiento. Gracias a su control de doble acción contra las arrugas, esta crema reduce el aspecto de las líneas de expresión y arrugas y mantiene la firmeza de la piel de forma efectiva, a la vez que preserva la textura y el tono de la piel.