Encontrarnos con lectoras de Belleza activa es siempre estimulante, pero si además es con motivo de un taller realizado con la colaboración y patrocinio de Eucerin, el evento se convierte en un verdadero lujo. En esta ocasión reunimos a 10 de nuestras lectoras para hablar sobre rutinas y cuidados faciales, para celebrar el décimo aniversario de la línea Hyaluron-Filler de Eucerin.
Posiblemente pensarás que eso de las rutinas diarias de cuidados faciales es algo que todas tenemos claras, pero lo cierto es que no siempre las llevamos a la práctica, unas veces por desconocimiento y otras por falta de tiempo… Y es que hacemos tantas cosas… ¡que no nos llega la vida!
«Es muy importante saber por qué tenemos que hacer las cosas para ganar en consciencia«. Con esa frase pronunciada por Laura, una de nuestras lectoras, nos queda clarísimo que hay ciertas cosas en las que tenemos que insistir desde estas páginas digitales. De forma que te explicamos cómo fue nuestro Taller de rutinas faciales con Eucerin y qué es lo que aprendimos.
¡A prepararlo todo!
Aunque habíamos convocado a nuestras lectoras a las 7 de la tarde, Marta Sánchez, directora de comunicación de Eucerin; Carme Chorto, asesora científica de la marca; Bel M. Dolla, redactora incansable de Belleza activa, y yo, habíamos quedado hacia las cinco y media en El Cercle para prepararlo todo para cuando llegasen nuestras invitadas. Colocamos perfectamente todos los productos en un lugar destacado, preparamos unas bolsitas para que nuestra lectoras guardasen los productos con los que fueron obsequiadas, repasamos los que queríamos explicar y nos dispusimos a esperar…
Puntuales como verdaderos relojes suizos fueron llegando nuestras lectoras en un suave goteo… Isabel, Laura, Maite, Meritxell, Olga, Patricia, Pilar, Sara, Vero y Victoriana. Cuando ya estuvimos todas, nos sentamos alrededor de la gran mesa que habían preparando para nosotras y que en ese momento aún estaba vacía pero que pronto estaría llena de una deliciosa merienda…
Tras dar la bienvenida de forma oficial a todas las asistentes, empezamos a presentarnos para conocernos un poco y descubrir cuáles son nuestras rutinas faciales.
Unas limpiaban su rostro solo por la mañana o por la noche, otras dos veces al día, unas utilizaban agua micelar, otras leche limpiadora, otras espumas limpiadoras… «no me gusta utilizar tónico porque siento que me reseca la piel…» explicaba una de ellas. Marta, aplicada, tomaba nota de los comentarios para darles respuestas durante la charla. Todas nuestras lectoras utilizaban crema de tratamiento y la mayoría contorno de ojos y suero… ¿pero en el orden adecuado? Y lo más importante… ¿Por qué tenemos que hacer tantas cosas y utilizar tantos productos? La respuesta nos la daría Carme Chorto…
Por qué tenemos que seguir rutinas de cuidados faciales
Y la respuesta a esta pregunta nos la dio Carme en su exposición, y se resume en que al cuidar de nuestra piel, siguiendo unas sencillas rutinas de cuidados faciales, lo que estaremos haciendo es cuidar el mayor organismo de nuestro cuerpo (ocupa entre 1,6 y 2 metros y pesa ¡5 kilos!) y el que nos protege del exterior.
Si descuidamos nuestra piel, el paso del tiempo será más evidente, ofreciéndonos una imagen deteriorada de nosotras mismas ante el espejo, lo que puede afectar a nuestro estado anímico… Y es que (y eso sí nos va a deprimir) el envejecimiento se produce, de forma progresiva, a partir de los 25 años…
En el envejecimiento unas cosas aumentan, nos explicó Carme, y otras disminuyen… Aumenta la flaccidez, las arrugas y la sequedad, y disminuyen la elasticidad, la firmeza, la resistencia y la luminosidad. ¡Una alegría, vaya!
Además del paso del tiempo, el envejecimiento de la piel aumenta con la exposición crónica a los rayos de sol, que produce manchas y otras lesiones cutáneas. ¿Y qué le pasa a nuestra piel cuando envejece? Pues que se adelgaza y se vuelve más seca, que las fibras de colágeno y elastina –que hacen que tenga un aspecto joven– se desestructuran, que nuestras células producen menos ácido hialurónico, que disminuye la luminosidad, se marcan las líneas de expresión y, lo que es aún peor, disminuye la capacidad de defensa de la piel, que es su misión primordial…
¡Pero no nos alarmemos! La solución está en la utilización de tratamientos anti-edad (que regeneren la epidermis, disminuyan la flaccidez y prevengan o disminuyan la aparición de arrugas), en ofrecerle una correcta hidratación y los lípidos que necesite y añadir filtros solares para proteger la piel, prevenir la aparición de manchas y la deshidratación. Pero los efectos casi no se verán sin una rutina de cuidados faciales perfectamente asimilada…
Y esto enlaza perfectamente con el comentario de nuestra lectora Laura, que nos decía que «Es muy importante saber por qué tenemos que hacer las cosas para ganar en consciencia«.
Pasos de la rutina de cuidados faciales
Llega el momento en el que Marta nos explica los diferentes pasos de una rutina de cuiadado facial, que nos ayudará a tener una piel más sana y con menos arrugas (el principal motivo de consulta en los tratamientos anti-edad.
- Higiene: es fundamental para eliminar la suciedad y el exceso de grasa que se acumula en la piel, y para la completa absorción de los activos de las cremas.
¿Cuándo? ¡Cada día! por la mañana y por la noche.
Así lo tienes que hacer:
Siguiendo, antentas, preguntas y respuestas de nuestras lectoras y amigas… - Desmaquilla los ojos, empapa un algodón y aplícalo, durante unos segundos, sobre cada uno de los ojos, para retirar el maquillaje delicadamente. ¡No hay que frotar como si no hubiese mañana! Tienes que ser delicada para no acabar con tus pestañas.
- Limpia la piel del rostro, con una emulsión limpiadora
–para pieles secas– o un gel –pieles normales, mixtas o grasas– y finaliza con el tónico. Aquí Marta le recordó a una de nuestras lectoras que si le parecía que el tónico le resecaba, es que no estaba utilizando el adecuado para su tipo de piel. Si te has maquillado, repite un par de veces la aplicación del producto limpiador. Por lo que respecta a las aguas micelares, la recomendación de Marta es utilizarla en ocasiones.
Aquí soy yo quien hace una aportación, complementaria a las explicaciones de Marta
- Aplica el contorno de ojos, porque la piel de esta zona es 10 veces más fina y la microcirculación sanguínea más lenta, lo que hace que el drenaje sea insuficiente y aparezcan las bolsas y las ojeras. Además el constante parpadeo hace que altere las fibras de colágeno y elastina, por lo que es más propensa a la pérdida de firmeza.
¿Cuándo? ¡Cada día! por la mañana y por la noche.
Así lo tienes que hacer: deposita un grano de arroz de producto en el dedo anular y aplícalo con pequeños toques, alrededor del hueso que rodea los ojos –¡no en la zona hundida ni sobre los párpados!– dibujando círculos, desde fuera hacia dentro, empezando por abajo. Un truco extra: puedes utilizar el contorno de los ojos en el contorno de los labios.
¡Nadie se pierde ni un solo detalle de las explicaciones de Marta! - Llega el momento del sérum facial. Este tipo de productos son súper concentrados de principios activos, que mejoran todos los signos relacionados con el envejecimiento. Su textura es muy ligera y se absorbe rápidamente, por lo que puedes utilizar inmediatamente la crema de tratamiento, solo hay que esperar unos segundos…
¿Cuándo? ¡Cada día! por la mañana y por la noche.
Así lo tienes que hacer: aplica un par de pulsaciones de producto sobre la mano, repártela y aplícala con suaves movimientos ascendentes desde el escote, hacia el cuello. Aplica más producto, si es necesario, y sube por tu rostro. Recuerda que tienes que luchar contra la tendencia natural de la piel, que la lleva a caer y desdibujar el óvalo. Con los dedos índice y mayor flexionados, formando una V, masajea desde la punta de la barbilla hasta la zona bajo las orejas, para redibujar el óvalo. Por último aplica el sérum sobre la frente –con movimientos ascendentes– y la nariz.
Probando la CC Cream, de la gama Hyaluron Filler, para escoger el tono más adecuado a nuestra piel. - Por fin el tratamiento habitual con dos productos, uno para la mañana y otro para la noche.
La crema de día hidrata y protege la piel de las agresiones externas, es importante que contengan SPF.
La de noche ayudan a la regeneración de la piel. Debes tener en cuenta que la regeneración celular es 3 veces más rápida de noche y que su pico de máxima eficacia está entre las 2 y 4 de la madrugada. ¡Que te pille durmiendo!
Así lo tienes que hacer: exactamente de la misma forma en la que te aplicaste el sérum facial, aplicando el producto con suaves movimientos ascendentes, desde el escote, pasando por el cuello y el rostro y redibujando el óvalo.
Y todos estos fueron los consejos que nos brindaron Marta Sánchez y Carme Chorto. Consejos que las asistentes al taller de rutinas faciales, ya están siguiendo, ¡nos consta! Para finalizar, cada una se llevó una selección personalizada de productos Eucerín, que incluía higiene facial, los tratamientos más adecuados a sus necesidades y una CC Cream para su tono de piel, todo de la gama Hyaluron Filler.
Llega el momento del adiós
Sin darnos cuenta ya eran más de las 9 y media de la noche y nos despedimos con la firme promesa de realizar más talleres de este tipo y, a poder ser, en otra ciudad española…
Mil gracias Isabel, Laura, Maite, Meritxell, Olga, Patricia, Pilar, Sara, Vero y Victoriana por vuestra presencia, atención, preguntas y aportaciones, que nos enriquecieron a todas. Gracias Vicente Zambrano por inmortalizar el taller ¡sin que nos diésemos cuenta! ¡Fue el misterioso caso del fotógrafo invisible! Y sobre todo, gracias a Marta y Carme, de Eucerin, por confiar, una vez más en Belleza activa!
Fotos: ©Vicente Zambrano