Si miramos en Instagram hay más de 700.000 publicaciones en las que se emplea el hashtag #jawline (mandíbula), para acompañar imágenes de rostros femeninos y masculinos. Y es que el óvalo facial es un gran protagonista en la belleza, así que no es de extrañar que muchos esfuerzos en el mundo de la cosmética se dirijan a potenciar su forma y ensalzar su atractivo natural. En el caso de los hombres, la mandíbula definida y que exprese fortaleza es un indicio de virilidad. Pero… ¿qué se respira en torno al cuidado de la mandíbula masculina? ¡No te pierdas esta entrada!
El atractivo de la mandíbula
En un artículo de la revista ICON, de El País, se definía la mandíbula como la «nueva tableta de chocolate», y es que garantizar una mandíbula musculosa y bien definida (prominente) es uno de los grandes retos beauty para ellos por su vínculo tradicional con lo definido como ‘virilidad’.
Lo hemos visto en los cómics y en los dibujos animados en los que los personajes masculinos aparecen con unas mandíbulas superlativas, que pretenden encarnar al fuerza ‘descomunal’ propia de los superhéroes. Y para ello se recurre a la mandíbula cuadrada ( y antinatural) del Capitán América, por ejemplo. En el cine, el recién fallecido Kirk Douglas dislumbró por su talento que hizo que su hoyuelo reinara ante cualquier proyector. Es su barbilla, como símbolo de masculinidad, uno de los grandes más característicos de su físico. El archiadmirado Brad Pitt o Matthew McConaughey también destacan por tener una barbilla que se adapta perfectamente con la belleza más normativa.
«Angulosa, definida, cuadrada, con un mentón también marcado”. Así es la mandíbula sexy que lucen estos, según la Dra. Pinilla, experta en Cirugía Plástica y Estética (Zaragoza). La experta asegura que las mujeres heterosexuales nos sentimos atraídas por estas mandíbulas, porque vinculamos el ángulo mandibular con la testosterona, virilidad y potencial sexual.
¿Cómo se logra esta barbilla?
Reto 1: Definir el óvalo
Cirugía ortognática. Según la Dra. Pinilla, el primer paso recomendado es visitar a un doctor para estudiar una posible ortodoncia o técnica para optimizar la oclusión de los dientes.
Volux: Se trata de una técnica estética sin cirugía, especialmente diseñada para restaurar y voluminizar el mentón y mandíbula a partir de los 30 años. En dos sesiones, se inyecta un ácido hialurónico más elástico con cánula o aguja y es una fórmula que presenta lidocaína para reducir las molestias. Disponible también en MaxiloDexeus.
El mewing. El ortodoncista John Mew diseñó, en 2012, este método que se basa en ejercicios basados en la posición de la lengua (pegándola al cielo del paladar) para desarrollar el contorno facial del tercio inferior. Así colocando la lengua de forma correcto ganaríamos en belleza. Pero… ¿basta este ejercicio para parecer más guapo? ¡Aquí te dejamos el vídeo para que lo analices tú mismo!
Reto 2: Suprimir la papada
Coolsculpting. Es una técnica que utiliza el frío para lograr la muerte de los adipocitos, así logra una cierta retracción cutánea, además de combatir la flacidez. Cuenta con la aprobación de la CE y FDA. Disponible en clínicas, como Cirugía Plástica y Estética (Zaragoza), Clínica Dermatológica Internacional (Madrid), Ribe Clinic (Barcelona).
Belkyra. Se inyecta una mínima cantidad por centímetro cuadrado para eliminar la grasa y retensar los tejidos. A pesar de emplear un anestésico local, se genera algo de escozor e inflamación pasajera. Además de acabar con la grasa, retensa los tejidos. Disponible en Clínicas Dorsia (presente en ciudades como Málaga, San Sebastián o Bilbao).
Ultherapy, el lifting ultrasónico. Los ultrasonidos focalizados de alta intensidad (HIFU) son los alidos para combatir la flacidez de la papada y el óvalo. Disponible en Centro Mar García (Madrid).
Liposucción láser o con ultrasonidos. Este sistema se basa en el láser o ultrasonidos para suprimir la grasa y evitar la flacidez, logrando la retensión de los tejidos. DIsponible en AC Cirugía Plástica (Valencia)