¿Deseas mantener ese hermoso bronceado que has conseguido estas vacaciones por más tiempo? Si la respuesta es afirmativa ¡la exfoliación es tu mejor aliado!
A pesar de que aún hay quien evita esta rutina durante el verano, pensando que la exfoliación «roba el moreno», exfoliar es el gesto obligado si lo que quieres es prolongarlo y sublimarlo. Y tranquila, el bronceado se produce en las estructuras más internas de la piel y cuando exfoliamos, solo se retiran las células muertas de la capa más superficial.
Bronceado duradero y exfoliación
La exfoliación es el proceso de eliminar suavemente las células muertas y la acumulación de impurezas en la capa superior de la piel. Esto no solo deja tu piel más suave y radiante, sino que también tiene beneficios específicos para prolongar tu bronceado:
- Uniformidad del bronceado: Después de exponer tu piel al sol, es natural que algunas áreas bronceadas sean más intensas que otras. La exfoliación ayuda a igualar el tono de tu piel al eliminar las células pigmentadas y dar paso a una piel fresca y uniforme.
- Renovación celular: Al eliminar las células muertas, permites que las células nuevas y frescas afloren en la superficie. Esto no solo mejora la textura de tu piel, sino que también garantiza que el bronceado se adhiera a las células de manera más uniforme y duradera.
- Mejora de la absorción: Una piel exfoliada tiene una capacidad mejorada para absorber productos hidratantes y autobronceadores. Al nutrir tu piel de manera adecuada, estás creando un ambiente propicio para mantener tu bronceado por más tiempo.
- Estimulación de la circulación: La exfoliación estimula la circulación sanguínea, lo que contribuye a mantener una piel saludable y con un brillo natural. Una mejor circulación también ayuda a distribuir el pigmento del bronceado de manera más uniforme.
- Prevención del descamado: Después de un día bajo el sol, es común que la piel comience a pelarse. La exfoliación suave y regular puede reducir este efecto no deseado, manteniendo tu piel suave y tu bronceado intacto.
Entonces, ¿cómo puedes incorporar la exfoliación en tu rutina para alargar el bronceado? Opta por exfoliantes suaves y naturales que no dañen la piel. Realiza la exfoliación dos veces por semana para no agredir tu piel, y asegúrate de hidratarla adecuadamente después de cada sesión de exfoliación.
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