Mostrar un cuerpo bronceado desde los primeros días de sol es mucho más fácil desde que existen los autobronceadores. Pero lo cierto es que no siempre se obtienen los resultados deseados con ellos. Para aplicarse correctamente un autobronceador y no sufrir los típicos problemas de zonas más o menos oscuras, piel negra de golpe, pliegues marcados, etc. hay que seguir tres reglas básicas: exfoliar, hidratar y autobroncear. Te lo contamos con detalle.
Desde hace unos años los autobronceadores permiten adquirir, y mantener, un tono bronceado natural y adecuado al tipo de piel. Esto se consigue gracias a un ingrediente fundamental: la DHA. La gran mayoría de autobronceadores contienen dihidroxiacetona o DHA, un azúcar que «reacciona» con la piel y transforma su color. Suele combinarse con otros azúcares (fructosa, sacarosa, glucosa) para desarrollar un tono aún más «natural». Es por ello que el color tarda un par de horas en «subir«, ya que debe producirse la reacción química que transforma el tono blanco de la piel en «moreno«. Además, los autobronceadores contienen sustancias hidratantes y suavizantes para embellecer la piel, especialmente en las piernas donde ésta suele ser más seca que en el resto del cuerpo. También pueden contener colorantes, cosa que facilita el aplicado y proporciona al instante un tono «maquillado», así como mica u otros minerales e ingredientes reflectantes que dan un aspecto luminoso y dorado a la piel.
Exfoliar, hidratar y autobroncear
Antes de aplicar un autobronceador hay que realizar una exfoliación corporal que elimine las células muertas e impurezas de la piel y deje ésta uniforme. Lo más indicado es realizar 24 horas antes de broncear un peeling profundo, que puede realizarse en casa o en un centro de estética. Inmediatamente después de la exfoliación, es imprescindible hidratar la piel en profundidad para reponer los lípidos y el agua perdida y restablecer la barrera cutánea. Esto permite, además, que al aplicar el autobronceador la piel absorba el cosmético necesario, no más ni menos.
Al día siguiente, después de limpiar la piel con una ducha y secar muy bien con pequeños toques (sin restregar), se aplica el autobronceador. Lo mejor es aplicar con generosidad el cosmético con movimientos amplios y extenderlo bien para evitar la acumulación de producto en los pliegues y rugosidades del cuerpo, como las rodillas o los codos, donde pueden aparecer después zonas más oscuras. También es conveniente asegurarse de cubrir toda la piel con el cosmético, ya que pueden producirse zonas más claras donde el producto no se ha aplicado.
Los autobronceadores con color facilitan este proceso, ya que puede verse dónde se ha aplicado y dónde no, pero hay que tener en cuenta que el color que se ve justo después de aplicar es sólo un colorante temporal que desaparece con la ducha, y no el tono que proporcionará el autobronceador de forma definitiva.
Si el autobronceador se aplica en el rostro, hay que asegurarse de extenderlo por el cuello, la nuca y las orejas, y usar un poco de aceite o vaselina en la raíz del cabello para evitar que quede en esta zona una línea oscura. Para la aplicación en la espalda es conveniente pedir ayuda. Después de aplicar el producto, hay que lavarse bien las manos para que no aparezcan negras.
No hay que reaplicar el producto enseguida, pensando que no se ha conseguido el color deseado. El tono definitivo aparece habitualmente en un par de horas, por lo que lo más indicado es esperar y, si se desea, reaplicar al día siguiente para intensificarlo. El color suele durar un par de semanas, por lo que es fácil mantenerlo si se realiza una aplicación de autobronceador semanal.
Es importante recordar, además, que el bronceado conseguido no protege de los rayos solares, por lo que es imprescindible el uso de un protector solar si se expone la piel al sol.
Recurre a ellos
◊ Gel Autobronceador Polysianes de Klorane. Gel-crema que proporciona un bronceado natural al cuerpo, enriquecido con Monoï de Tahití, aceite extraído de la flor de Tiaré y utilizado en la Polinesia para hidratar, nutrir y proteger del sol la piel y el cabello, para todo tipo de piel. 100 ml 17,20€. En farmacias y parafarmacias
◊ Terracota Sunless de Guerlain. Gel con color refrescante que proporciona un bronceado instantáneo sin marcas visible al cabo de una hora, contiene aceite de argán de cultivo biológico (hidratante, nutritivo), para cuerpo. 150ml 49,20€
◊ Sunific Autobronceador Gel-Crema Nacarado con Color de Lierac. Autobronceador fresco y fundente que proporciona un bronceado intenso y uniforme, enriquecido con AHA (ácidos frutales) de naranja, piña y papaya que exfolian ligeramente para un bronceado liso y uniforme. 125ml 23€.
◊ Autobronceador Hidratante de Avène. Crema autobronceadora para cara y cuerpo que proporciona un tono natural, calma e hidrata, para todo tipo de pieles incluidas las más sensibles, hipoalergénico, no comedogénico, sin parabenos ni efecto graso. 100ml 19,95€
◊ Crema Lumière Autobronceadora de Thalgo. Crema-gel para rostro y cuerpo que se adapta a todos los tonos de piel y proporciona un dorado natural. 150 ml 27,80. En spas y centros de estética
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