Estamos en el momento del año más hermoso. Día a día aumentan las horas de sol y podemos disfrutar de luz natural hasta pasadas las 9 de la noche. En Belleza activa ya hemos empezado a hablar de los protectores solares y la piel. También hablaremos de los efectos del sol, la sal y el cloro en el cabello, pero de lo que hablamos mucho menos es de la protección y el cuidado de los ojos en verano. ¡Hoy lo vamos a hacer!
Protección del sol
Uno de nuestros mandalas es que cada día del año tenemos que proteger nuestra piel de los rayos del sol, pero tal vez no sabes que, al igual que en la piel, el sol puede causar daños leves en la vista a corto plazo: irritaciones, quemaduras o hipersensibilidad a la luz. Sin las debidas precauciones a diario, a largo plazo pueden aparecer daños más graves e irreversibles como las cataratas, la degeneración macular o el cáncer.
¿Y qué podemos hacer? Pues es muy sencillo: los oftalmólogos recomiendan el uso diario de gafas de sol, sobre todo aquellas que con un espectro amplio bloquean los rayos UVA y UVB y, no sólo eso, también protegen de la arena, el viento y el polvo. Hay un punto en el que somos muy pesadas: es importantísimo que te compres las gafas de sol en ópticas. Si lo haces en mercadillos o lugares no especializados puedes poner en grave riesgo tus ojos. Si te pones unos lentes oscuros, la pupila de tus ojos se abrirá para captar más luz. Si los lentes sólo son oscuros y no incluyen fotoprotección, los rayos solares pueden producirte cataratas y quemaduras en la córnea, así como degeneración macular o melanoma ocular.
Lágrimas artificiales
Aunque no afecta en la misma forma e intensidad a todo el mundo, es muy posible que hayas notado cómo los cambios de temperatura –como el del aire acondicionado–, el ambiente de lugares secos o de clima árido o ventoso afectan a tus ojos. Seguro que también te sucede si pasas muchas horas frente al ordenador, realizando un trabajo que te obliga a estar muy concentrada, o leyendo muchas horas. Para evitar la molesta sequedad, te recomendamos que tengas a mano lágrimas artificiales o una solución humidificadora.
Por otro lado, debes tener cuidado y no restregarte los ojos en la playa o la piscina, ya que el cloro de la piscina o la arena pueden irritarlos e incluso te puedes causar heridas en el globo ocular.
Limpieza
Y aquí llega otra de nuestras obsesiones: la limpieza diaria del rostro y ojos, sobre todo si los has maquillado. Escoge productos que sean respetuosos con los ojos y adecuados al tipo de maquillaje que has escogido. Por ejemplo si quieres eliminar maquillaje waterproof, deberás utilizar un desmaquillante oleoso y si la máscara y las sombras son normales, puedes utilizar un desmaquillante al agua. Eso sí, es imprescindible que esté testado bajo control dermatológico y oftalmológico. También resulta importante que tengan efecto calmante. Te ofrecemos un par de propuestas:
- Agua floral desmaquillante Calmante al Aciano, de Klorane. Con propiedades calmantes y descongestionantes, controlando cada etapa de su desarrollo. Especialmente formulada para los ojos sensibles y que usan lentillas, el agua desmaquillante calmante al aciano, sin perfume, sin parabenos y sin alcohol, elimina delicadamente todos los restos de maquillaje del rostro, de los labios y de los ojos, dejando la piel limpia y fresca. Probada bajo control dermatológico y oftalmológico. Su precio: 17,50€/400ml
- Beauté des Yeux. Biphase Protecteur Cils. Démaquillage Pureté Éclat, de Guerlain. Aceite bifásico de extremo frescor limpia y respeta los ojos sensibilizados por las lentillas de contacto. El confort es inmediato, la sensación de limpieza es increíble. Está formulado con un activo fortificante que refuerza las pestañas* para embellecer la mirada día tras día… Su precio: 44,40€/125ml.
- Encontrarás más propuestas en nuestra reciente entrada: Lo más nuevo para limpiar la piel de tu rostro.
Cuida la alimentación
Si, en verano es complicado mantener una dieta y sobre todo vigilar todos los alimentos que ingerimos, no obstante, debes saber que existen algunos alimentos de los que puedes abusar sin sentirte culpable, puesto que lo que más aportan a nuestro organismo es una cantidad importante de vitaminas beneficiosos para la vista. Por ejemplo:
- Frutas y verduras: En verano es más apetecible consumir este tipo de alimentos ya que nos aportan una sensación de frescura y saciedad al instante. Existen frutas y verduras de temporada que aportan gran cantidad de vitaminas beneficiosas para nuestro organismo, algunas de ellas son:
- Col rizada o kale: La verdura de moda está cargada de vitamina K, que protege contra el envejecimiento celular y las enfermedades cardíacas. Además, ayuda a regular los niveles de presión arterial constriñendo los capilares y disolviendo los coágulos de sangre, por lo que ayuda en gran parte a corregir las ojeras (inflamación ocular).
- Tomate: El ingrediente estrella del gazpacho y el salmorejo, tan consumidos en verano, es rico en licopeno (también está presente en la sandía) que, gracias a sus propiedades antioxidantes, previene el daño del ADN celular y ayuda a aumentar la producción de colágeno. Es decir, lucha contra el envejecimiento de la piel, revirtiendo la aparición de arruguitas y líneas de expresión.
- Coles de Bruselas: son lo mejor para cuidar la vista. Contienen vitamina A, que ayuda a regenerar la piel, recobrando su brillo y además refuerzan la visión. Por otro lado, la zeaxantina resulta eficaz para proteger la retina humana contra radiación solar.
- Pescados: El salmón y el atún, por ejemplo, son ricos en ácidos grasos omega-3 que contribuyen a mantener la visión en condiciones óptimas.