Cuando se trata de rasgar y definir la mirada, es imposible no pensar en un delineado perfecto. Perfilar los párpados puede transformar completamente la mirada y darle el toque que desees: más elegante, más atrevido y rebelde, etc.
Pero si hay algo que caracteriza el momento de hacerse el eyeliner es su dificultad y frustración: no saber el grueso y la longitud del rabillo ideal, no conseguir que los dos ojos queden iguales… Hacerlo bien a la primera no es tan fácil como parece, y seguro que más de una persona abandona y decide prescindir de él.
Es por eso que hoy te traemos unos trucos y consejos para que no renuncies nunca más al delineado y, de paso, te quede perfecto durante todo el día.
Escoger el eyeliner
Antes de empezar con el proceso, debes saber qué eyeliner quieres usar porque, sí, hay diferentes tipos. Se pueden encontrar de tipo rotulador, lápiz, en formato gel-crema o líquido.
¿Y que los diferencia? Pues casi todo. Aunque el resultado a simple vista pueda parecer muy similar, la verdad es que el lápiz le da un toque difuminado, mientras que los otros dan un resultado más marcado. Eso sí, la dificultad de aplicación también es distinta, ya que, por ejemplo, un delineado en crema o líquido requiere de un buen pulso o mucha práctica para conseguir líneas rectas.
Los delineadores más comprados y usados son los de tipo rotulador porque son los más «fáciles» de usar cuando no se tiene casi práctica.
¡La forma del ojo importa!
¿No has notado que el delineado que se hace alguien, cuando te lo haces tu no queda igual? Ni aunque lo copies con todo detalle. Eso se debe a que la forma del ojo importa mucho a la hora de delinear, no a todas las formas les queda bien el mismo tipo de raya.
- Ojos pequeños. La verdad es que el delineado no es el mejor amigo, ya que reduce aun más el tamaño de los ojos. En estos casos es mejor optar por delineados sencillos, delgados, y con colores distintos al negro. También se puede delinear la línea del agua con un lápiz blanco, para dar la sensación de ojos más grandes.
- Ojos grandes. En estos casos, se puede optar por un eyeliner más exagerado, dibujando tanto el párpado como la línia de agua inferior. Esto consegue marcar y definir muchísimo la mirada, dando la sensación de unos ojos un poco más pequeños y rasgados.
- Ojos juntos. Para producir una sensación de separación entre los ojos, lo más recomendado es usar iluminador en la zona del lagrimal, para ampliar la zona, y marcar con el delineador la zona externa de los ojos, como si fuera una V de lado.
- Ojos separados. Al contrario que en el caso anterior, en este tipo de mirada el delineado perfecto debe incidir en la esquina interior del ojo, y engrosar la raya en la V externa, para así conseguir una sensación de aproximación de los ojos.
- Ojos almendrados. Aquí se quiere redondear la mirada, por eso lo ideal es hacer una línea gruesa con el eyeliner por todo el ojo, y del mismo grosor, difuminando por la parte del lagrimal y haciendo un rabillo corto.
- Ojos redondos. En estos casos, para darle un aire almendrado, es adecuado marcar bien la V externa del ojo con una trayectoria recta, no diagonal, que se trace des del lagrimal exterior.
- Ojos caídos. En esta ocasión, al contrario que los ojos redondos, se debe dibujar un rabillo en diagonal, en dirección al final de la ceja. El rabillo es mejor que no tenga una forma curvada.
Trucos para el delineado perfecto
Una vez se decida de qué forma queremos la raya del ojo, y con qué vamos a hacerla, podemos dar paso a nuestros consejos para que consigas el mejor resultado posible.
- No estires el ojo. Es muy común estirar el párpado cuando se quiere delinear el ojo, pero esto lo único que produce es que, al soltar no se vea el resultado deseado. Lo más ideal es delinear con el ojo cerrado, sin estirar, y abrir cada dos por tres los ojos para asegurar que vamos por buen camino.
- Cinta adhesiva. Si trazar líneas rectas no es lo tuyo, no te preocupes, ¡te proponemos una solución! Y es tan sencillo como colocar un trocito de cinta adhesiva en la zona externa del ojo, marcando la dirección del rabillo. Así seguro que el pulso y el trazo no te fastidian, y te aseguras que los dos ojos queden iguales.
- Puntos guías. Es un truco bastante similar al del celo, pero en esta ocasión se trata de dibujar puntitos en los sitios claves, para así después juntarlos en una línia. Por ejemplo, puedes marcar el inicio, un punto medio y el incio y el final del rabillo, y luego lo juntas todo. Solo faltará perfeccionar el grosor deseado y, voilá, ¡eyeliner!
- Sombra de ojos para que dure más. Un truquito para que el delineado dure todo el día (o toda la noche, ¡para cuando volvamos a salir!) es repasarlo con una sombra de ojos del mismo color. Ya verás que así aguantará mucho más tiempo.
Hazte con tu eyeliner ideal
Para terminar, te recomendamos algunos delineadores para que puedas hacerte con aquel que te vaya mejor, y que se adapte a tus necesidades.
Everlasting Ink Liner #KillBlack, de MeloMeli. Se trata de un delineador de color negro, muy intenso y puro, y en forma de rotulador. Es un producto de larga duración y se fija en un abrir y cerrar de ojos (¡nunca mejor dicho!). Desde la primera pasada deja un negro intenso, que se mantiene intacto sin necesidad de darle retoque. Como ya hemos dicho, es tipo rotulador, como un rotring, y facilita el trabajo a todas aquellas personas con poca maña o con un pulso nervioso. Su precio: 12,95€ (consíguelo aquí con un 10% de descuento usando el código BELLEZAACTIVA).
AMC Eyeliner Gel, de Inglot. Un delineador con una textura crema-gel, con pigmentos de alta intensidad. Le da una cobertura total y un color vivo, y todo esto con un efecto perfecto con una sola aplicación. Aunque su fórmula es cremosa y delicada, a los 60 segundos se seca y se asienta, quedando intacto durante todo el día. Además, es resistente al agua, al movimiento de los párpados, a las horas, al sudor… Y no hace pliegues ni se cuartea. Cuenta con un gran abanico de colores, para elegir el que más te guste. Precio: 17,99€
Highliner, de Marc Jacobs Beauty. Un eyeliner en formato lápiz, pero con una textura gel que permite usar pigmentos ricos para un color intenso y una aplicación de las más delicadas. Es un lápiz resistente al agua, de larga duración que, una vez seco, no gotea. Su fórmula súper moldeable permite una aplicación súper vesatil. Ofrece un color brillante e intenso en una sola pasada, y está disponible en muchos colores. Viene con un afila-lápices integrado, y se puede difuminar antes de fijar para conseguir un efecto ahumado. Su precio: 24,99€
Liquidlast 24-Hour Waterproof Liner, de MAC Cosmetics. Es un delineador de ojos líquido, en negro intenso que combina la larga duración con la precisión. Se aplica con su propio pincel, se desliza fácilmente y permite dibujar líneas perfectamente definidas. También es resistente al agua y al roce, dura todo el día. Está disponible en 4 tonos distintos, pigmenta mucho y, además, se seca muy rápidamente para conseguir el delineado perfecto. Precio: 22€
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