Sol y agua. Hete aquí los dos elementos más maravillosos del verano y los dos principales enemigos del cabello. ¿Cómo sobrevivir al verano con la melena intacta? No hay problema: durante los meses de julio y agosto, cada lunes vamos a presentarte un arsenal de ideas y cosméticos que te ayudarán. Este verano ¡nos soltamos el pelo!
Frente a la bucólica imagen del pelo al aire en verano, tod@s sabemos que en esta época es imprescindible un buen corte y tener a mano un coletero para recogerlo. O eso, o lamentarlo cada vez que pasamos el peine y se enreda en nuestra larga melena de puntas abiertas. No hace falta llegar a estos extremos porque, si se cuida, el cabello es de lo más agradecido y sólo con protegerlo convenientemente conseguiremos llegar a septiembre con la melena brillante e intacta.
El cabello se encuentra a diario totalmente expuesto a las inclemencias del tiempo. Por eso es imprescindible protegerlo. Más en verano, ya que el sol, la sal del mar, el aire, la arena, el cloro de las piscinas, todo contribuye a atacar la fibra capilar. Como la piel, el pelo se deshidrata y reseca, el color se altera, tanto si es natural como si llevas tinte, y el cabello queda frágil y quebradizo, sin brillo y difícil de peinar. Parece que mantener el pelo sano en verano es una tarea casi titánica, pero lo cierto es que no requiere muchos más cuidados que el resto del año. Lo que ocurre es que así como cuando estamos en casa acostumbramos a usar una mascarilla una vez por semana, el acondicionador a diario, tenemos un champú para nosotr@s, adaptado a las necesidades de nuestro cabello, uno para los niños y, quizá, alguno más para ir alternando, en verano y de vacaciones vamos a salto de mata, con los cosméticos justos en el neceser y pocas ganas de estar pendientes de otra cosa que de tendernos al sol. De acuerdo, nos merecemos un descanso, pero el cuidado del cuerpo también es un descanso, un mimo necesario que luego agradeceremos.
El cabello, por sí solo, no puede generar sustancias para alimentarse y protegerse. Nos toca a nosotr@s darle lo que pide
Además, el cabello tiene un problema añadido: no puede defenderse sólo. A diferencia de la piel, que tiene mecanismos de defensa, el pelo es una materia inerte. Bellísima, pero sin vida. Aunque con mucha sensibilidad, ya que suele reflejar nuestro estado de ánimo y nuestros cambios físicos (hormonales, de estrés, cansancio, etc.) mucho mejor incluso que la piel. Y el cuero cabelludo, que sí reacciona ante las agresiones externas, hace lo que puede, pero necesita ayuda.
Igual que con la piel, en verano los cuidados del cabello deben adaptarse a las condiciones climáticas y el ritmo de vida. Los hábitos de higiene, los cosméticos e incluso la alimentación deben cambiar un poco. Apunta unas cuantas ideas para mantenerlo sano:
- Evita la exposición solar del cabello en las horas de mayor radiación, especialmente entre las 12 del mediodía y las cinco de la tarde
- Si vas a estar mucho tiempo al sol, cúbrelo con un sombrero o una gorra de material natural y transpirable (paja, algodón, lino) para que no esté húmedo. Pero no lo tapes contínuamente, reserva los sombreros para el sol y deja que el pelo respire, húmedo y tapado se deshidrata
- En la playa y la piscina, usa un protector solar para cabello
- Después del baño en el mar o la piscina, lava el cabello con un champú nutritivo y enjuaga con abundante agua tibia o fría para eliminar restos de sal, cloro, arena, cosméticos, y sécalo bien con una toalla, sin frotar para evitar que se rompa
- No cepilles el pelo mojado ni uses peines de púas metálicas, abren las puntas y favorecen que se rompa el pelo. Utiliza peines de púas anchas de madera o plástico y peina el cabello mechón a mechón, empezando por las puntas
- Tampoco uses prendedores de metal, se calientan con el sol y cortan el cabello
- No dejes el cabello mojado expuesto al sol ni uses secador o planchas muy calientes
- Utiliza cosméticos adecuados a tu cabello, aplica acondicionador a diario y cada tres o cuatro días una mascarilla reparadora