Suaves, reconfortantes, purificantes, frescas y muy nutritivas. Las mascarillas son la forma más sencilla de proporcionar un tratamiento cosmético con un alto contenido de activos a la piel en un momentos crítico. Como ahora, que nuestro cutis reclama frescor ante la ola de calor que nos invade. ¿Te apuntas?
Las mascarillas faciales son sin duda uno de los cosméticos más esenciales y objeto incluso de ironías sobre la belleza femenina. ¿Quien no recuerda la clásica imagen de película de una señora con rulos y una crema verde sobre el rostro? Y es que, bromas aparte, la clave de las mascarillas es mantener durante un espacio de tiempo relativamente largo (entre cinco y veinte minutos) el contacto con la piel para que ésta absorba la mayor cantidad posible de los activos que contiene el cosmético.
Se puede establecer una clasificación de las mascarillas teniendo en cuenta su función. Así, hay mascarillas hidratantes y nutritivas que aumentan el grado de humedad de la piel y proporcionan nutrientes como vitaminas, minerales, etc.; mascarillas limpiadoras, que suelen estar elaboradas con arcilla blanca (caolín) o elementos detergentes y que eliminan la suciedad profunda de los poros; mascarillas exfoliantes, a base de ácidos o con partículas de arrastre que eliminan las capas de piel y las toxinas superficiales; y mascarillas específicas para tratar los distintos problemas de la piel, como las anti-arrugas de efecto tensor (efecto lifting), las aclarantes de las manchas cutáneas, las drenantes que eliminan la inflamación de la piel, las destinadas a piel seca, a piel grasa, etc.
Actualmente pueden encontrarse mascarillas faciales para tratar los problemas más diversos y en los más diversos formatos. De las clásicas cremas que se aplican en una capa gruesa durante quince minutos se ha pasado a mascarillas de efecto inmediato, que pueden usarse como un cosmético «flash» ya que proporcionan efectos casi instantáneos, relajando rasgos y «borrando» arruguitas y bolsas. Otra de las opciones novedosas son las mascarillas impregnadas en tejido, a imitación de las que se aplican en los centros de estética, y que son auténticos cócteles de activos.
Otra opción son las mascarillas termo-activas y crio-activas, que aumentan o disminuyen la temperatura corporal respectivamente, para lograr mejores resultados. También son interesantes las mascarillas que cambian de color para indicar que ya han conseguido su efecto y pueden ser retiradas.
La frecuencia de uso depende de las necesidades de cada piel y de las características de las mascarillas, pero puede pautarse su aplicación una vez por semana.
Cómo aplicarlas
- Hay que aplicar las mascarillas sobre la piel limpia de maquillaje y cosméticos, por lo que es conveniente realizarlo después de limpiar con un producto adecuado
- En el caso de algunas mascarillas nutritivas, antiarrugas, etc., es conveniente exfoliar la piel antes de aplicar la mascarilla para que ésta actúe con mayor profundidad
- Escoge el momento más adecuado para su uso. Una mascarilla relajante puede usarse antes de acostarse, mientras que una de efecto flash puede ser adecuada antes de una fiesta o un acto importante
- Aprovecha el tiempo de exposición de la mascarilla para relajarte y descansar
- Elimina la mascarilla tal como indiquen las instrucciones. Algunas mascarillas no se eliminan, por lo que es conveniente hacer penetrar el resto de producto mediante masajes circulares en el rostro y cuello hasta la absorción total
Escoge la que mejor te va
♥ Hydra Zen Overnight Serum-in-Mask de Lancôme. Mascarilla que nutre intensamente la piel y borra los signos de cansancio y estrés, combina la frescura y capacidad de penetración de un serum con la comodidad y confort de una mascarilla, calma al instante y revitaliza. 75ml 71€
♥ Anti-rojeces Calm de Avène. Mascarilla calmante reparadora para pieles enrojecidas o irritadas, proporciona una sensación de frescor inmediato (rebaja la temperatura cutánea), útil como tratamiento reparador urgente (SOS), así como post-afeitado, sofocos de la menopausia, quemaduras solares, post-láser vascular y post-depilación facial. Sin parabenos ni perfume. 19,50€
♥ Mascarilla Hidratante Refrescante de Nivea. Enriquecida con aloe vera, vitamina E e Hydra IQ, hidrata y refresca intensamente, para piel normal y mixta. Pack de dos mascarillas (15ml) 2,49€
♥ Mascarilla Facial de Aloe Vera y Salvia de Corpore Sano. Hidrata, purifica y deja la piel suave y tersa, contiene gel de aloe vera de cultivo biológico certificado y hojas de salvia, son conservantes, parabenos, colorantes ni siliconas. Pack de dos mascarillas (2 x 7,5g) 1,95€
♥ Mascarilla Instante Detoxificante de Caudalie. Fórmula en gel-crema que elimina toxinas e impurezas, afina la piel y cierra los poros. Contiene orujo de uva, arcilla rosa, café, enzimas de papaya y un cóctel fitoaromático con 8 aceites esenciales. El orujo de uva refuerza la protección de la piel contra los radicales libres, desinfiltra los tejidos y activa el drenaje. 75ml 23€
♥ Mascarilla Ultra-Reafirmante de Farma Dorsch. Mascarilla anti-fatiga, hidratante y reparadora de efecto tensor inmediato (lifting). De fecho arcilloso, en pieles grasas ejerce un efecto sebo-regulador que elimina los brillos, impurezas y puntos negros y cierra los poros. Contiene plasma marino (contiene los mismos oligoelementos que la sangre), activos vegetales y marinos, aceite de caléndula (antiinflamatorio, cicatrizante, refrescante, antiséptica) y menta piperita (refrescante y calmante). Para todo tipo de pieles. 22,56€
Pues yo me quedo con la Mascarilla anti-rojeces Avène, y con los novedosos productos de la tecnología Blue Plasma en mascarillas faciales como los de http://www.puresc.com/total-detox-duo-blue-plasma-y-chloro-plasma.html
Gracias por un blog tan genial, siempre con post interesantes
🙂
Gracias Julian
A mi es un cosmético que me encanta. Cuando lo uso, caliento una toalla de algodón 100% en el microondas y me la coloco encima (lo copié de un tratamiento de que me hice en un balneario). Es una sensación muy confortable, y la mascarilla así «penetra mejor». Aunque reconozco que en verano me da un poco mas de pereza… Un beso chicas!
Yo en verano pasaría de la toalla caliente… 😉
Me gustaría ser más constante para ponérmelas y también para exfoliar la piel, pero sólo suelo hacerlo cada mes o mes y pico.
Aunque eso es mejor que nada, tal vez deberías aplicártelas con mayor frecuencia… Sin embargo eso mejor que nada!!
Antes no le daba mucha importancia a las mascarilla, pero desde que empecé a usarlas semanalmente ya nunca lo dejaría de hacer. Yo uso la Instante Detoxificante de Caudalie, me encanta 🙂
Muchas agracias por tu comentario, Iuliana!! Un beso!!
Como me gustan las mascarillas, debería hacerlo más a menudo. Un saludo 🙂
Pues aquí tienes algunas opciones para que escojas la que más te guste!!! 😉
Soy una adicta a la mascarilla facial semanal. Todos los domingos me regalo un tiempo para hacerme una limpieza de cutis casera (depilación de cejas y bigote, exfoliación, mascarilla y un rato de masaje con la crema de noche). La mascarilla es imprescindible y más en verano. Es mágica, te deja una piel como nueva. Me encanta la sensación de frescor y tersura que te queda después.
Muchísimas gracias por compartir con todos tu secreto de belleza. Es un magnífico regalo el que le haces a tu piel!!!! Un beso!!!