Nos lavamos los dientes a diario y, generalmente, en repetidas ocasiones. Aún así, es posible que las prisas y el cansancio nos lleven a no hacerlo todo lo bien que deberíamos. ¿Quieres saber si es tu caso? ¡Sigue leyendo!
¿Por qué es importante una correcta higiene bucal?
Como explican los expertos de Oral-B, lavarse bien los dientes “es el primer paso para mantener unos dientes y encías sanos, ya que contribuye a eliminar los restos de comida, la placa y el sarro de las superficies de los dientes. Además, ayuda a reducir el riesgo de caries y enfermedad periodontal, que son las principales causantes de la pérdida de piezas dentales.”
Cepilla tus dientes después de cada comida o, al menos, dos veces al día (por la mañana y por la noche). De hecho, el cepillado de antes de ir a dormir es el más importante de todos. Como explican desde PHB, «durante esas horas la boca no genera saliva y las bacterias acumuladas campan a sus anchas. Esto se debe a que la saliva es antibacteriana y protege la flora bucal de los elementos nocivos. Durante el sueño, no se mueve y no puede ejercer su función de limpieza.»
Los pasos que debes seguir
En Internet hay muchas publicaciones relativas a cuál es la mejor forma de lavarse los dientes, y no todas coinciden. Nosotras te traemos las indicaciones que ofrece el Consejo General de Dentistas.
- Para simplificar la rutina y asegurarte de que no te dejas ningún rincón sin limpiar, sigue siempre el mismo orden, dividiendo la boca en cuatro sectores (arriba a la derecha, arriba a la izquierda, abajo a la izquierda y abajo a la derecha).
- Coloca una pequeña cantidad de dentífrico en el cepillo (es suficiente con el tamaño de un guisante). Si utilizas más se generará demasiada espuma, lo que entorpecerá la limpieza.
- Debes dedicar 30 segundos a cada zona, es decir, 2 minutos en total. Recuerda cepillar suavemente el exterior, el interior y la superficie masticatoria (la parte de arriba del diente).
- Para limpiar las caras externas e internas, coloca el cepillo en un ángulo de 45º en dirección a la línea de las encías. Cepilla cada diente, moviendo suavemente el cepillo desde la encía hasta el final del diente, y nunca al revés. Repite este movimiento varias veces.
- Para las superficies internas de los dientes delanteros, inclina el cepillo verticalmente y realiza movimientos suaves desde la encía hasta el final del diente, con la punta del cepillo. En las superficies masticatorias, utiliza movimientos horizontales hacia delante y hacia atrás.
- Para evitar el mal aliento, limpia suavemente la lengua. Para ello, coloca el cepillo perpendicularmente en la parte posterior y haz barridos hacia delante. También es recomendable limpiar el paladar.
- Antes de ir a dormir, utiliza el hilo dental para asegurarte una limpieza profunda allí donde no llega el cepillo: entre los dientes y bajo la línea de las encías.
Cómo escoger el cepillo de dientes
Como apuntan desde la firma Colgate, “la mayoría de los profesionales de la odontología coinciden en que un cepillo de cerdas suaves es ideal para eliminar la placa y los restos alimenticios de los dientes”. Añaden que “los cepillos de cabeza pequeña también son recomendables, puesto que llegan mejor a todas las zonas de la boca.”
Una alternativa cada vez más extendida es el cepillo eléctrico. Y es que, como informan desde la web de Sanitas, si bien un cepillo de dientes manual y uno eléctrico pueden ser igual de eficaces –siempre que se utilice la técnica adecuada y durante el tiempo necesario–, en la práctica el segundo garantiza una mayor comodidad y eficacia. Su uso es también muy útil para inculcar en los niños el hábito de lavarse los dientes.
En cualquier caso, el cepillo dental debe reemplazarse cuando muestre señales de desgaste o cada tres meses. Desde Colgate también recomiendan cambiarlo después de un resfriado, “puesto que las cerdas acumulan gérmenes que pueden provocar una nueva infección.”
También te puede interesar
Yo tengo los dos cepillos, el eléctrico creo que va mejor pero a veces si tengo mucha prisa uso el otro. Veo que tengo que mejorar algunas cosas y ahora que estoy embarazada todavía más. Gracias por los consejos!
Nos alegra mucho que te haya servido 🙂
Utilizaba el elécrico, pero ahora he vuelto al manual. Manías.
Besitos
Las dos opciones son buenas, es cuestión de gustos!
Yo sigo con el cepillo manual, pero voy a tener que pasarme al electrico. Todo son ventajas. Gracias por la información.
Yo estoy encantada con el mío!
Mi rutina, mañana, tarde y noche es usar primero el irrigador y luego el cepillo eléctrico.
Eso ya es de alumna avanzada!
Muchas gracias!!! Làstima que no lo supiera antes!!!
Es muy útil. La verdad
Nunca es tarde para aprender algo nuevo 🙂 ¡Un abrazo, Sara!
Como siempre, genial artículo. Sin duda es mejor pasarse al cepillo eléctrico.
Un abrazo!
Gracias, Paz! Realmente los cepillos eléctricos son muy cómodos, aunque hay quienes prefieren el manual. Todo está bien si se sigue la técnica correcta!
Genial todo el artículo de principio a fin, es muy importante el cuidado de la boca no solo por estética, también por salud. Los cepillos Oral B (por lo menos el mio), tienen un temporizador que hace mas fácil el cepillado de cada zona en el tiempo correcto, cada 30 segundos avisa para cambiar de zona y a los dos minutos vuelve a avisar para concluir el cepillado. En mi caso particular os aseguro que el uso del cepillo eléctrico ha sido un antes y un despues en mi higiene bucal.
Gracias, como siempre, por vuestros consejos.
Muchas gracias, Carmen! Es cierto lo que dices del temporizador, y es súper cómodo! Además, enseguida te das cuenta que cuando nos lavamos con el cepillo manual no solemos dedicarle el tiempo necesario. Un abrazo!