Por fin ha llegado el verano, el momento del año en el que disfrutamos de más horas al aire libre y cuando más fotoprotectores se usan, aunque todas sabemos que deberíamos utilizarlos a diario. Aunque los medios de comunicación no hacen más que informar sobre la necesidad de protegernos del sol, lo cierto es que existen muchos mitos sobre el protector solar y los factores de protección, por eso, en la entrada de hoy te desvelamos qué hay de verdad de algunos de los mitos que más circulan, para que podamos usarlo de forma eficaz y segura.
Las creencias erróneas sobre la protección solar representan un peligro significativo para nuestra salud, ya que incrementan las posibilidades de sufrir quemaduras solares y desarrollar cáncer de piel.
Mitos sobre protección solar
Compartimos contigo un decálogo de mitos sobre la protección solar. Su objetivo es desmentir estos mitos y promover el uso adecuado de los protectores solares.
1.- El sol genera tolerancia o callo solar: FALSO
Es una peligrosa práctica que arrasa en redes sociales que determina que tomar el sol sin protección solar, ayuda a desarrollar tolerancia a los rayos UV. La Dra. González, dermatóloga-quirúrgica de IMR, afirma que «la exposición colar continuada en ningún caso hace que nuestra piel gane resistencia. Se trata de una práctica muy peligrosa, ya que la radiación UV es un carcinógeno humano reconocido. El bronceado o las quemaduras solares son el reflejo del daño en el ADN de las células de nuestra piel y no proporcionan una protección efectiva frente a esta radiación. De hecho, exponerse al sol de manera continuada y sin protección aumenta el riesgo a desarrollar cáncer de piel y produce un foto-envejecimiento prematuro».
2.- Los fotoprotectores son válidos de un año para otro: FALSO
Una vez abiertos, los fotoprotectores se rigen por el PAO (Periodo After Opening), que es el tiempo en el que el producto mantiene sus características después de su apertura. Además, este índice se refiere a unas condiciones adecuadas de conservación, que no son a las que suele someterse en su uso habitual en verano, habitualmente más extremas en humedad y temperatura.
3.- Todos los fotoprotectores son iguales: FALSO
Entre los diferentes productos existen diferencias en cuanto a:
- Fotoestabilidad: no es suficiente con que contenga filtros sino que estos deben ser lo más estables posible bajo la acción de la radiación solar.
- Fotoprotección: algunos productos protegen frente a la radiación ultravioleta B mientras otros incorporan filtros frente al UVA, el infrarrojo A o la luz visible.
- Remanencia: adherencia del producto a la piel
- Texturas: muy importante, ya que el uso de una crema solar depende en gran medida de que su textura se adaptar a nuestras preferencias.
4.- El factor de protección (SPF) indica el tiempo de protección: FALSO
El SPF nos dice cuántas veces más podemos estar expuestos al sol para producir el mismo efecto de eritema o enrojecimiento que si no hubiéramos utilizado el fotoprotector. Es decir, si aguantamos al sol 10 minutos sin quemarnos, con un protector solar del 30 podríamos aguantar 30 veces más. Aunque hay que precisar que este índice se refiere solo a la protección frente a rayos UVB.
5.- Algunos protectores bloquean el 100% de la radiación: FALSO
No hay ningún protector que bloquee la radiación por completo, algo que no lograríamos ni siquiera mezclando diferentes filtros.
6.- La suma de dos cremas solares supone la suma de su actividad: FALSO
Si aplicamos un fotoprotector SPF 20 y otro SPF 30 no lograremos protegernos el equivalente a un producto con SPF. Solo conseguiremos la protección que nos da el de mayor SPF.
7.- Una aplicación diaria es suficiente: FALSO
La permanencia en la piel de un protector solar es como máximo de dos horas, por lo que después de ese período es necesario volver a aplicarlo. También tras baños de más de 20 minutos, en caso de una sudoración excesiva o si ha habido una fricción en la zona.
8.- No es necesario aplicar el fotoprotector en días nublados: FALSO
La radiación solar atraviesa las nubes por lo que es necesario proteger la piel incluso aunque no exista sensación de calor, en días nublados y también en invierno.
9.- Con protector solar no nos ponemos morenos: FALSO
Como hemos señalado, no existe la fotoprotección 100% por lo que siempre habrá un porcentaje de radiación solar que incida en nuestra piel y active la producción de melanina, un sistema de protección natural de nuestro cuerpo que hace que nuestra piel se broncee. Por tanto, estar moreno en cualquier grado indica que ha habido un daño solar.
10.- La piel morena o la raza negra no se queman: FALSO
La población de raza negra o los fototipos más altos tienen mayor facilidad para broncearse. Aunque es cierto que se queman con menor facilidad, eso no quiere decir que su piel no sufra los efectos dañinos de la radiación solar.
11.- No hace falta reaplicar las cremas resistentes al agua: FALSO
Según la normativa actual, todos los protectores deben aguantar al menos un baño de 20 minutos. Algunos duran más tiempo y así lo indican con los términos water resistant (permanecen tras un baño de 40 minutos) y waterproof o very water resistant (son eficaces tras un baño de 80 minutos). De cualquier modo, los especialistas recomiendan reaplicar el fotoprotector tras el baño, sobre todo si se ha utilizado la toalla para secar el cuerpo.
Muy buen post que aclara muchas dudas.
Nos alegra que te guste, Ángeles!!! Un besote!