Los meses de invierno pueden suponer para tu melena una aventura demasiado desafiante. Las bajas temperaturas del exterior y el abuso de la calefacción en los interiores crean un contraste arriesgado para la salud de tu cabello. Es muy habitual que observemos, con preocupación, como nuestra melena adquiere un aspecto apagado y la fibra capilar aparece quebradiza y extremadamente seca. ¡Y no queremos empezar el año así! Por eso queremos comentar contigo los mejores cuidados del cabello en invierno y que los puedas incorporar, cuanto antes, a tu rutina.
El impacto del clima invernal
El descenso del mercurio, la lluvia, las rachas de viento, la nieve, y ya no hablamos de los temporales más adversos… Los primeros meses del año están marcados por una meteorología que impacta en nuestra salud. Tenemos claro que es imprescindible utilizar prendas de abrigo para evitar resfriados y tomar medidas para evitar los contagios, pero…¿tenemos claro lo que necesita nuestro cabello para resguardarse del frío? Vamos a repasar porque es importante tener en cuenta esta cuestión.
La huella de las bajas temperaturas
Durante esta temporada el cuero cabelludo y el cabello sufren una mayor deshidratación, lo que dispara, a su vez, la fragilidad. ¿El resultado? Es una melena con un aspecto apagado y muy vulnerable a la rotura.
Como señalan desde el Hospital Capilar, con las bajas temperaturas, los vasos sanguíneos del cuero cabelludo se dilatan menos y, por tanto, la vascularización cae. En sintonía, los nutrientes llegan con mayor dificultad al cabello y las glándulas sebáceas reducen su ritmo. El cuero cabelludo, además, presenta una mayor probabilidad de descamarse y se pueden agravar patologías previas como la psoriasis.
¡Cuidado con la calefacción!
Si en verano el aire acondicionado no es un buen aliado para la salud, en invierno tampoco lo es la calefacción. ¿Qué supone para nuestra melena sumergirla en un microclima de calorcito? Por un lado, que se dispare la porosidad del cabello, lo que hace que se vuelva más frágil y quebradizo. En otras ocasiones la doctora Amaro, de Hospital Capilar, ya nos ha advertido de la deshidratación capilar que provoca la exposición a la calefacción en los interiores.
A esta situación, se le debe sumar que utilizamos con mayor asiduidad los gorros y los sombreros durante estos meses, lo que provoca un apelmazamiento en las raíces y al mismo tiempo la sequedad en las puntas, que quedan completamente vulnerables. Así el pelo sufre una mayor electridad estática y más encrespamiento.
El viento, otro mal compañero
La fragilidad se dispara con el viento, que abre la cutícula y la reseca en exceso. Los polvos microscópicos se levantan con las rachas y la fibra se ensucia y electriza. Por su parte, la radiación ultravioleta, reflejada en la nieve, actúa de efecto pantalla. ¿El resultado? Quemaduras capilares que incluso superan las que tienen lugar en verano. Por eso, es imprescindible utilizar gorros o capuchas que protejan el cabello de la fusión de la nieve y el sol.
Los mejores cuidados capilares en invierno
Llegados a este punto estamos en la obligación de animarnos en este reto presentando una serie de claves para garantizar las salud del cabello frente a los desafíos que plantea el invierno. No queremos que nuestra melena esté seca, sin vida y quebradiza. Te presentamos cinco cuidados del cabello en invierno que te pueden ir la mar de bien.
Aporta a tu melena una hidratación profunda con mascarillas hidratantes. Para contrarrestar el robo de la humedad natural del cabello que logra el combo de aire frío y seco y la calefacción es muy importante utilizar mascarillas hidratantes. Son muy recomendables las que contienen ingredientes como el aloe vera, el aceite de argán o de karité.
Suma acondicionadores sin aclarado y resta champús agresivos. Para mantener la hidratación capilar durante todo el día son muy interesantes las primeras fórmulas que te comentamos, mientras que los champús más agresivos no son buenos invitados en este reto porque pueden eliminar los aceites naturales del cuero cabelludo.
Combate los efectos de la calefacción. Ya hemos avanzado que la calefacción central y los calefactores provocan una gran sequedad en el cabello y en el cuero cabelludo, al reducir la humedad en el ambiente. Para contrarrestar estos efectos, podemos actuar en dos sentidos: por un lado, hidratando el cuero cabelludo con aceites como el de almendra dulce para prevenir la sequedad y la descamación, y, por otro lado, usar un humificador para mantener un nivel de humedad adecuado.
Blinda tu cabello ante el frío intenso. Cubrir el cabello con bufandas o gorros al salir a la calle, de materiales suaves como algodón o seda para evitar la fricción es una gran decisión en el compromiso de cuidar tu melena. También lo es evitar exponer al exterior el cabello mojado (además de un gran desencadenante de cualquier resfriado, al menos en mi caso). Y es que, aunque pueda parecernos exagerado, el agua puede congelarse y producirse roturas.
Disiminuye, a la mínima expresión, el uso de herramientas de calor. Utiliza el secador a baja temperatura y siempre después de aplicar un protector térmico. Deja a un lado los rizadores y las planchas, porque su presencia en tu rutina solo puede disparar los niveles de sequedad capilar.
Te recomendamos también que acudas al estilista de forma frecuente. Ten en cuenta que cada dos meses es muy interesante cortar las puntas para garantizar que la melena continúa creciendo sin quedarse por el camino.
Y aunque a veces no seamos todo lo consciente que deberíamos: nuestro cuidado del cabelllo también empieza por lo que ingerimos. Y es que consumir alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 tiene un impacto muy positivo en nuestra melena, como sucede con las frutas y verduras, que promueven la producción de colágeno y son buenos protectores de los folículos pilosos.
Cinco aliados para mimar tu melena en invierno
Nourishing Shampoo, de la gama Structure Repair de La Biosthétique. Un champú nutritivo que ejerce una acción relajante sobre el cabello seco y castigado por el exceso de calor durante el peinado y las influencias nocivas del medioambiente. Está formulado con aceites naturales que hidratan, nutren, reparan y ejercen una acción antiencrespamiento que deja la melena suave y brillante. Su precio recomendado: 33,50€/200ml
hop Smooth Hydration Mask, de Montibello. Mascarilla altamente hidratante para cabellos secos, rebeldes y/o encrespados que restaura la hidratación del cabello. Los resultados no se hacen esperar: cabello perfectamente hidratado, suave, sedoso y brillante al instante. Su precio: 21,85 €/200 ml
Protector Capilar Total, de Nuggela & Sulé. Protege el cabello del sol y de las altas temperaturas y restaura hasta el 90% del brillo natural de la melena. Con aceite de chía y de ricino y extracto de hojas de moringa, evita la destrucción de proteínas, aumenta la retención de agua y previene la foto-oxidación. Su precio: 14,90 €.
Heated.Defense, de Kevin.Murphy. Presenta en textura espuma, invisible y sin peso, que proporciona protección térmica contra el calor hasta 232ºC / 450ºF. Apto para todo tipo de cabellos, también desenreda, añade brillo y tiene acción alisadora. Su precio: 31€/150ml
Crema de día de Mango, de Klorane. Bálsamo acondicionador para el cabello seco que aporta nutrición y facilita el desenredado. Además, alisa las escamas y cubre perfectamente el cabello para desenredar y peinar más fácilmente incluso el cabello más áspero, aportándole suavidad y brillo.