Aprovechar las vacaciones de verano para darse un «retoque» estético es una opción cada día más frecuente, pero no todas las intervenciones quirúrgicas están aconsejadas en esta época del año.
El calor dificulta la recuperación post-operatoria y la reducción de inflamaciones, cicatrices y morados, y hay algunas intervenciones que precisan del uso de fajas o vendajes compresores. Sin embargo, las nuevas técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas permiten hacer cada vez más operaciones estéticas.